Campeche

Denuncian crematorio clandestino en Ciudad del Carmen

De acuerdo con pobladores, la pequeña casa habilitada solo con un tanque de gas representa un foco de infecciones por el olor nauseabundo que sale; piden verificar las instalaciones
Los vecinos comenzaron a ver que salía humo negro de la vivienda, el cual despedía un hedor insoportable / Fernando Kantún

Un foco de infección debido a que no cuentan con las instalaciones adecuadas, solamente una pequeña casa y un tanque de gas, representa el crematorio clandestino que está ubicado en el kilómetro 128 de la carretera Costera del Golfo 180 Ciudad del Carmen-Villahermosa, entre Atasta Pueblo, El Cedrito y Nuevo Progreso; además del olor nauseabundo que deja, por lo que pidieron a las autoridades que verifiquen que dicho crematorio esté en regla, así lo expusieron los pobladores de Península de Atasta, José Mora e Irma Núñez, quienes mencionaron que a estos se suma que deja la Planta Procesadora de Carga y Descarga de Gas de Atasta.

De acuerdo con los denunciantes desde hace varios días se enteraron de que en dicho lugar se cremaban o incineraban cadáveres, cosa que a ellos no les parece. “Está mal que hayan puesto ese crematorio porque se ve que no tiene la higiene adecuada, creman a las personas al aire libre y puede haber contagios, depende de cómo lo hagan, pero al ver cómo está el lugar es posible que no tengan las medidas de higiene necesarias”, dijo doña Irma Núñez, quien pidió no ser retratada.

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Comentó que ellos no sabían que se había instalado un crematorio en la zona, “apenas hace unos días empezamos a ver que salía humo negro en la casa esa, (ubicada sobre el kilómetro 128 de la carretera Carmen-Villahermosa), y está mal donde lo pusieron porque está cerca de la población”.

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“Ese tipo de cosas se deben hacer en lugares que tengan las condiciones higiénicas adecuadas y también genera duda la legalidad del crematorio porque lo tienen escondido”, insistieron.

“No sabemos si tiene los permisos correspondientes para poder hacer ese tipo de cosas, no sabemos si están en regla o no; por eso le pedimos a las autoridades de Salud que chequen qué condiciones hay, si tienen permisos para funcionar porque representa un riesgo de salud para los habitantes de la zona”, comentó.

Por su parte, José Mora señaló que “es importante que la autoridad tome cartas en el asunto porque, primero nadie sabía qué se hacía en ese lugar; solamente que salía humo negro todos los días, y tampoco un algún letrero que identifique; solamente vemos cómo sale el humo negro y huele mal, te dan ganas de vomitar”.

Asimismo, dijo que no está bien que se use de esta forma el terreno, “andan mal las personas responsables y al no tener ningún señalamiento o que identifique la actividad del lugar, todo parece indicar que es un negocio clandestino y las autoridades deben de tomar cartas en el asunto sobre todo por el lado de la higiene”.

Por ello, en un recorrido realizado por las inmediaciones se pudo constatar que en dicho terreno, ubicado en el kilómetro 128 de la carretera Costera del Golfo 180 Ciudad del Carmen-Villahermosa, entre Atasta Pueblo, el Cedrito y Nuevo Progreso, que a simple vista es una casa, sin pintura y recién terminada, que carece puertas, ventanas, ni portón o alguna reja, solamente cubierta para que no se vea el interior con tablas que asemejan una puerta y una cortina negra con techo de lámina de zinc.

Sin embargo, llama la atención que al parecer una casa o galerón deshabitado tenga a un costado dos tanques estacionarios, sin ningún letrero o señalamiento de advertencia, además de que en la posterior sobresale un tubo de entre cinco a 15 pulgadas de diámetro.

De acuerdo con los dos principales métodos funerarios, que son la cremación y la inhumación, ambos afectan el medio ambiente, por un lado la cremación emite a la atmósfera óxidos de carbono, dioxinas y otros contaminante, y la inhumación afecta al terreno y los acuíferos.

De acuerdo con el ingeniero químico del Instituto de Catálisis y Petroquímica del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), José Luis García, un cuerpo humano emite unos 27 kilógramos de dióxido de carbono cuando es quemado.

La combustión incompleta durante la cremación produce monóxido de carbono. Asimismo, la volatilización de metales o la deposición de metales sobre el hollín, que se emite a la atmósfera, es responsable de los agentes contaminantes mercurio, cadmio y plomo.

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CC