Este domingo, el Aeropuerto Internacional de Campeche “Ing. Alberto Acuña Ongay”, registró la movilización de seis unidades de transporte aéreas, de las cuales dos corresponden a las naves provenientes de Cuba que regresaron a su lugar de origen, una perteneciente a la Guardia Nacional (GN), así como dos más privadas que emprendieron vuelo con destino hacia la Ciudad de México, donde presumiblemente abordaron integrantes del gabinete del gobierno federal.
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En las afueras, había elementos del Ejército Mexicano, así como de la Secretaría de Marina (Semar), y de la Guardia Nacional que cumplían con el protocolo de acompañamiento diplomático internacional, donde las camionetas con los integrantes de la visita internacional comenzaron a llegar desde las siete de la mañana, hasta que el último vuelo salió alrededor de las once de la mañana.
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En cuanto a la aeronave comercial que arribó a la terminal aérea campechana, este correspondía al vuelo 2 mil 440 proveniente de la Ciudad de México, que tuvo una salida programada a las once de la mañana con 15 minutos, que corresponde a la aerolínea “Aeromexico”, que usó una aeronave tipo EmbraerE19AR, con identificador AMX2440, con un aforo aproximado de 60 personas que llegaron al Estado, la mayoría que eran turistas por lo que fueron abordados por los prestadores de servicios de traslado.
Sin embargo, el vuelo 2 mil 441 que salía de Campeche hacia la Ciudad de México registró un lleno total, por lo que el equipaje de mano, así como el “excedente” que tuvieron en cuanto al equipaje podían llevarlo consigo y depositarlo en los espacios inferiores de los asientos, en el caso de las maletas grandes que no fueron documentadas, serían enviadas en el siguiente vuelo con un costo adicional para los pasajeros.
Además, dos viajeros que tenían como destino viajar a la Ciudad de México tuvieron que alargar su estancia innecesariamente, debido a que la prestadora de servicios de traslado “Aeromexico”, sobrevendió los espacios disponibles que había en el interior de la unidad aérea, por lo que en primera instancia ofrecieron una indemnización de cinco mil pesos a cada persona que declinara voluntariamente su vuelo, sin que hubiera una respuesta positiva por parte de los viajeros.
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AA