Hasta el pasado sábado 8 de abril, en el municipio de Carmen se ha registrado 16 de los 27 suicidios dados a conocer en el Estado de Campeche, con lo que a nivel Entidad es primer lugar, tratándose de una situación alarmante cuyo elevado porcentaje se debe a que los que cometen este lamentable hecho son personas que sufren de algún trastorno mental.
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Así como llegar al abuso de sustancias prohibidas, como las drogas, desilusiones, rechazos, fracasos, pérdidas sentimentales, problemas escolares o profesionales o bien alguna cuestión familiar, puntualizó José Manuel Sánchez Bonilla, director del Centro de Integración Juvenil de Carmen (CIJ).
De acuerdo con los reportes que se han hecho, en lo que va del año en Carmen se han registrado 16 personas que decidieron quitarse la vida, siendo el principal método el ahorcamiento; mientras que en la capital del Estado se han reportado cuatro muertes de este tipo, seguido de Champotón con tres, mientras que Calkiní, Hopelchén, Escárcega y Calakmul suman uno cada cual, para un acumulado estatal de 27 suicidios hasta el 9 de abril.
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A razón de que Carmen ocupa el primer lugar en suicidios de la Entidad, Sánchez Bonilla abundó que las personas que deciden estos es porque “no creen que sus vidas pueden mejorar y tampoco reconocen que el suicidio no es la solución a un problema temporal”.
El director del CIJ agregó que en los jóvenes el mayor riesgo de suicidio deriva de presiones familiares y escolares, cambios bruscos en la vida, cambios hormonales, acoso escolar y cuestiones relacionadas con su orientación sexual.
“El suicidio se puede prevenir porque las personas que proyectan atentar contra su vida presentan síntomas claros, como cambios en el apetito, falta de participación en eventos sociales, abuso de drogas y actitud de abandono en el cuidado personal; igualmente, cambios en los hábitos para comer o dormir, pérdida de energía o interés en cosas que antes disfrutaban”.
Las señales se extienden mediante autoagresiones, abandono de las actividades cotidianas, cambios de humor extremos acompañados de ira y agresividad, perfeccionismo acompañado de gran autocrítica y sentimientos de culpa.
Incluso hay situaciones que escalan la lógica pues existe la planificación del suicidio. “Se hace evidente cuando vemos al ser querido discutir seriamente sobre opciones específicas de hacerlo, justificarlo como una opción, o acaparar grandes cantidades de medicamentos; otra señal de alarma es cuando se ponen a ordenar temas pendientes, preparar su testamento, revisar o contratar seguros de vida o hacer arreglos para garantizar el bienestar de la familia”, precisó.
Por último, dijo que los familiares de estas personas deben estar atentas a los llamados de alerta y buscar ayuda profesional, evitando que continúen con los pensamientos.
El especialista expresó igual que es lamentable comprobar que en Carmen las estadísticas indican que por cada mujer que comete suicidio lo hacen tres hombres.
Los datos sobre este fenómeno social alarman porque los implicados o ejecutantes son mayormente personas jóvenes.
De hecho, el Inegi establece que el suicidio es la cuarta causa de muerte en personas de 15 a 29 años y que en este rubro los estados con mayor incidencia son Chihuahua, Yucatán y Campeche.
En cuanto a la manera elegida por las víctimas para cortar su existencia, el ahorcamiento encabeza las preferencias, seguido por los disparos por arma de fuego, envenamiento y tirarse de pisos altos de edificios o de puentes.
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LV