Pese a que el año pasado el titular de la Secretaría de Educación del Estado (Seduc), Raúl Pozos Lanz, se comprometió a la rehabilitación del Centro de Desarrollo Educativo (Cede) de Candelaria, el cual fue construido en 2015 y desde esa fecha las instalaciones están solas y se deterioran al no tener uso, al momento no hay respuesta de la autoridad educativa.
Aunque se ha tratado de buscar información en la sede de maestros sobre el avance de los trabajos que supuestamente se realizarían para la rehabilitación de este edificio, ubicado sobre la avenida Emancipadores en la colonia Nueva Creación, hasta los supervisores desconocen la situación acerca de este inmueble.
Por lo que después del compromiso de Pozos Lanz realizado en la sede de los docentes en este municipio, nada se sabe de su promesa, mientras que las instalaciones del Cede se deterioran todos los días.
Han pasado varios meses y en determinados momentos POR ESTO! ha realizado el monitoreo del lugar, por lo que se constató que sigue solo y en malas condiciones que se agravan al paso de los días, pero de la promesa de que será rehabilitado no hay noticias de cuándo será.
Las autoridades educativas del municipio se abstienen de dar declaraciones, presuntamente por temor a represalias, aunque ellos continúan cómodos en la sede de maestros en el Centro de la ciudad.
Durante el compromiso de Pozos Lanz se supo que los maestros meditaron acerca del cambio cuando las instalaciones estén en condiciones de ser ocupadas, pero no están convencidos, pues señalaron que el edificio no cuenta con servicio de telefonía e Internet.
Por lo tanto, estas instalaciones que costaron varios millones de pesos se deterioran solas sin que tengan uso, y continúan como un “elefante blanco” porque en ningún momento han sido utilizadas, ni se les ha dado el uso para el cual el proyecto se realizó en este municipio.
Deterioro
Al no contar con el mantenimiento necesario que debería tener, las instalaciones se dañan con las condiciones climatológicas, por lo que varios millones de pesos literalmente fueron “tirados a la basura” y también sirvieron para justificar gastos.
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JG