Una de las tradiciones que aún se preserva en la comunidad de Concepción es la de pedir dulces de casa en casa, la cual consiste en la formación de un grupo de niños que se organizan para salir a las calles gritando en maya "Obchala Obchala Obchala", una forma de pedir alimentos en honor a los fieles difuntos, donde les regalan frutas, dulces caseros, pan e incluso pibes que ya fueron rezados.
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Lo anterior lo dio a conocer el joven promotor de la cultura maya de la comunidad, Eduardo René Nah Mian, quien aseguró que este ritual es una tradición similar al Halloween, solo que en esta comunidad es netamente en maya el salir a pedir dulces de casa en casa. Las familias elaboran sus altares con frutas, dulces, panes y otros alimentos, los cuales son repartidos después del rezo o rosarios.
Se sabe que esta tradición se ha realizado desde hace más de 100 años y se practica de generación en generación. Se seguirá preservando organizando a los pequeños, quienes caminan con calabazas, velas y veladoras para iluminar sus caminos, ya que en la comunidad hay varias calles en penumbras; sin embargo, como andan en grupos, no se corre peligro alguno al ser una comunidad pequeña donde todos se conocen y no hay maldad o malicia.
A diferencia del Halloween, en Concepción los niños salen dos noches a pedir "Obchala Obchala" de casa en casa, pidiendo su llamado “matan” para saciar su hambre. Cada integrante tiene una comisión para cargar lo recibido de las familias; uno de ellos lleva una bolsa donde guardan dulces, panes, frutas, refrescos y los tradicionales pibes. Al finalizar el recorrido, lo recolectado se reparte entre todos. En esta ocasión participaron más de 20 niños acompañados por el promotor de la cultura maya, quien aseguró que para fin de mes realizarán el desfile de despedida de los pixanes.
JGH
