La lluvia ácida puede ocasionar daños en viviendas, a la salud de las personas y en los ecosistemas, advirtió el presidente de la Asociación de Biólogos del Estado de Campeche, Gerardo Alfonso Avilés Ramírez, al señalar que lugares como Monterrey y la Ciudad de México registran afectaciones por la industrialización que, en el caso de Campeche, de no atenderse puede tener un impacto ambiental grave, y alertó que en Carmen podría ser peor debido a que el parque vehicular es superior a la superficie terrestre.
Para reducir el impacto ambiental por la lluvia ácida, que contribuye a los gases de efecto invernadero que a su vez generan el calentamiento global y cambio climático, se debe optar por la reducción de emisiones contaminantes y el consumo de artículos como los textiles.
Ante la denuncia de habitantes de Atasta de indicios de lluvia ácida en la zona, de acuerdo a lo expuesto por la Asociación ambientalista “Marea Azul” en Ciudad del Carmen, aclaró que no tiene conocimiento de que exista en la Isla, sin embargo, aceptó que los factores que la causan están presentes en los vehículos, el transporte marítimo y las industrias, en este caso la petrolera.
“Existen casos de lluvia ácida en ciudades como Mérida, Villahermosa, Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, donde se cuenta con un gran parque vehicular e industrias”, lamentó.
En el caso de El Carmen, Avilés Ramírez dijo que cuenta con un parque vehicular muy elevado que sobrepasa la superficie de la ciudad, aunado al comercio y el transporte marítimo.
En cambio, en la capital, en Lerma funciona la Termoeléctrica que cuenta con un registro de esparcimiento de ceniza proveniente de otros elementos que con la lluvia se intensifican más.
Alta toxicidad
El investigador explicó que la gravedad del daño depende de la cantidad de lluvia que se precipite, aunque hay reportes de casos extremos en la vegetación, como las cosechas que se queman completamente e, incluso, la contaminación del agua.
En el ser humano la combustión de los vehículos genera un gas altamente tóxico que afecta las vías respiratorias y causa alergias, asma u otro padecimiento del sistema respiratorio. El efecto se puede ver en la corrosión en infraestructuras ya sea de edificios, monumentos o vehículos.
Subrayó que si bien la lluvia ácida genera bastantes afectaciones, lo que se debe hacer es reducir la industrialización y el parque vehicular para contrarrestarla.
Soluciones propuestas
Una forma de ayudar es contar con un transporte público eficiente, que reduzca el uso de particulares, lo que ayudaría a bajar los índices de emisión de gases de efecto invernadero hasta 30 o 40 por ciento, adaptarse al uso de bicicletas, patines o patinetas o algún vehículo de tracción manual.
En los últimos 10 años en la arquitectura se utilizan los parques lineales, con grandes avenidas, donde regresa la vía peatonal con árboles y áreas verdes, o muros y techos verdes que ayudan a dejar de emitir gases de efecto invernadero.
JGH