La pérdida de alrededor de 100 toneladas de sandía en Hopelchén, no es lo único que afectaría al sector, pues la sequía pronosticada para este año, así como el inicio de la temporada de calor a finales de marzo, incidirían en el costo del alimento, señaló el vendedor Guadalupe Chan Can, quien precisó que el precio del producto registraría aumentos al consumidor final.
Tras llegar de Hopelchén, señaló que en estos momentos el costo del alimento de proveedor a distribuidor está entre los 5 a 6 pesos por kilogramo, que alcanza hasta los 90 pesos por pieza, si se considera que existen sandías que llegan a pesar hasta unos 15 kilogramos.
Por lo que el costo podría incrementarse hasta los 15 pesos por kilogramo, lo que significaría que aquella pieza de 15 kilos alcanzaría hasta los 225 pesos en promedio. Dijo que el costo del producto podría aumentar por dos motivos, uno es el desecho de más de 100 toneladas del alimento por plagas, y el segundo, cuando se intensifique la temporada de calor y sequía, pues señaló que la sandía necesita de mucha agua para su desarrollo y ser atractiva comercialmente.
“Hay que buscar el mejor producto, que sea de primera línea, sino hasta nosotros perdemos porque la gente no lo compra. Venimos desde el municipio de Hopelchén donde hay problemas, pero encontramos buenas piezas en Nuevo Progreso”, fueron algunos de los señalamientos del comerciante Guadalupe Chan Can.
Semilla diferente y plagas
Productores menonitas de Nuevo Progreso enfrentan una de sus peores temporadas en la producción de sandía, debido a que la fruta no ha alcanzado la calidad esperada, lo que ha provocado el rechazo de compradores del norte y centro del país.
Aunque los productores prefieren no hablar abiertamente del tema, trascendió que la mala cosecha podría estar relacionada con el tipo de semilla utilizada, presuntamente una variedad híbrida de origen chino, la cual habría sido resultado de pruebas genéticas con la chigua. Sin embargo, también se señala que el clima inusualmente frío de febrero pudo haber influido en el desarrollo del fruto.
Otro factor que podría haber afectado la calidad de la sandía son las plagas, principalmente la mosca blanca y las chicharritas, que suelen afectar cultivos de chigua y soya. Estas plagas generan virus que afectan la consistencia de la pulpa de la sandía, dejándola blanda y sin las características deseadas.
JY
