Un predio el cual era usado como tienda departamental situada en la zona centro terminó derrumbada a consecuencia del mal estado lo que provocó que dos autos terminen debajo de los escombros y uno más con daños producto de las piedras que cayeron.
Los hechos ocurrieron a las 20:20 horas de la noche del miércoles, cuando el inmueble situado en la calle 10 entre 57 y 59 empezó a fracturarse sin que ningún ciudadano se percate de la situación, ante la fuerza de la lluvia la fachada así como un balcón cayó al vacío lo que causó que una camioneta y un coche estacionado terminen sepultados.
En ese momento pasaba un ciudadano abordó de su auto compacto el cual también resultó dañado por él escombro, rápidamente testigos auxiliaron a la afectado al tiempo que daban aviso al número de emergencias.
Al sitio agentes estatales cerraron la circulación para evitar otro accidente, mientras en la primera indagación de hechos solo se registraron pérdidas materiales los cuales ascendieron a más de los 250 mil pesos.
El tramo se mantuvo cerrado mientras autoridades como protección civil municipal y estatal realizaron el rescate de los vehículos; trascendió en el sitio que dicho inmueble mantenía sellos de clausura por parte del INAH, el cual impidió que se realizara los trabajos de remodelación requeridos.
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AN