Daños de regular cuantía y dos personas heridas, entre ellas una menor de edad, fue el saldo de un hecho vial ocurrido en el malecón donde el guiador de un auto compacto no respetó la señal de alto de unos obreros y se proyectó contra un taxi que salía de una estación de combustible.
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El accidente aconteció cuando un padre con su menor hija circulaba a bordo del automóvil Renault modelo Kwid con matrículas DGF-612-B, sobre la avenida Pedro Sainz de Baranda y con dirección a la costera, cuyo guiador, pese al tráfico de la zona, excedía los límites de velocidad.
Al pasar el cruce de la Joaquín Clausell, un grupo de obreros detuvieron el paso de los carros para que transitara una maquinaria pesada. Esto fue observado por el taxista de la unidad Chevrolet modelo Spark, marcado con el número 115 de la agrupación “Radar”, quien salía del estacionamiento de una estación de combustible. Para su mala suerte, el dueño del primer compacto no respetó la orden de alto y se saltó al obrero, pero al no percatarse del coche de renta se proyectó de frente.
Por el fuerte golpe ambas unidades tuvieron daños de regular cuantía, pero la pareja resultó con lesiones en el cuerpo. El taxista junto con un grupo de testigos dio parte al número de emergencias, donde al paso de los minutos llegaron paramédicos del Sistema de Atención Médica de Urgencias (SAMU), quienes lograron estabilizar a las víctimas.