Conrado Roche Reyes
El término felicidad tiene distintos significados. Desde ilusiones sensoriales, por ejemplo, aquellas ilusiones visuales que tenemos debido a la percepción visual de imágenes que son falsas o erróneas, a ilusiones cognitivas, en las que interviene nuestro conocimiento del mundo.
Pero felicidad es también sinónimo de esperanza o deseo, por eso frases como “empezamos a envejecer cuando perdemos la ilusión” o “he recuperado la ilusión de hacer música de nuevo”.
Mantener esa ilusión es esencial para que sigamos en movimiento y luchando por nuestros sueños. Los límites, tales como el miedo, muchas veces son una ilusión. El miedo puede ser una creencia cual espantajo que nos impide crecer.
Existe un espacio entre mi persona y las personas que se esconden a sí mismas detrás de una pared de falacias. Nunca se vislumbra la verdad. Luego es demasiado tarde cuando ya se han ido las ilusiones de felicidad. Poder disfrutar de esta vida es el mejor regalo de todos. Como yo he disfrutado estos últimos días en la Riviera Maya del sol, del astro rey, y de un pequeño sol que es mucho más enorme que el anterior, mi nietecita María, nombre elegido entre las elegidas. Un añito que me proporciona cien años de felicidad. ¡María, María!, niñita hermosa, rayo de luz en mi vida. Y eres real. Te digo, mi pedacito de carne sonriente, ¿qué es la vida? Una locura. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una historia. Y la mayor de las bondades es pequeña, ya que toda la vida es un sueño, y los sueños no son más que sueños. Y, mi amorcito, tú eres el único sueño real que existe.
Entonces poder disfrutarte en esta vida es el mejor regalo de todos. Tu amorcito, que aún no comprendes, es como mi amor por ti. Sentimiento, es esperanza, es ilusión.
Pero... el problema yace en cómo vas a pasar esta extraña y preciosa vida. Si la vas a pasar tratando de verte bien y creando la ilusión de que tienes poder sobre las personas y las circunstancias, o si en cambio, la vas a probar, la vas a disfrutar y así vas a encontrar la verdad sobre quién eres. Hijita, cuando no hay rencor es que ya solucionaste tu vida plena de felicidad. Puede que ya no esté, que no lo vea, pero María, finalmente mi mayor ilusión es seguir teniendo ilusiones. Bebé inteligente, de ojos brillantes y sabios. Y las personas inteligentes tienen derecho sobre las ignorantes: el derecho a perdonarlas e instruirlas… a pesar de todo y todos. Te ama con toda su alma, mi muñequita, tu abuelito.