Ecos de mi tierra

Luis Carlos Coto Mederos

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Nombres mal puestos

MODESTO vive alardeando

de ser en todo el mejor.

Marchita y vieja está FLOR.

Mil cosas desarma ARMANDO.

TRINA es pésima entonando.

No lució nunca LUCIA.

PAZ tiene una guerra fría

declarada a su marido.

Y ABSTEMIO vive metido

siempre en la cervecería.

Duerme oscura ILUMINADA.

SOLEDAD nunca está sola.

Y LUZ prepara champola

completamente agotada.

De ADONIS no digo nada,

¡es feo de pura ley!

PLACIDO es igual a un buey

bufando, armando camorra.

CASTO se pega la gorra

porque del descaro es rey.

REMEDIOS se siente mal.

DOLORES es saludable.

Y de Pascuas no le hables

ni por asomo a PASCUAL.

No estés preparando cuál

caso es el de TOLOMEO,

porque estaría muy feo

ganarle con discreción

a CASIMIRO el mirón

y al desvelado MORFEO.

Es muy débil ROBUSTIANO.

Nada sostiene PILAR.

LINDA es fea hasta matar

de susto a cualquier humano.

PRUDENCIO mete la mano

en la fuente de frituras

y hace cuatro mil locuras

sin prudencia o discreción.

Y ANGEL ni cree en la oración

ni vuela por las alturas.

Lourdes Díaz Canto

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Adiós a mi época

Esa época se ha ido

cuando todo era vedado,

el escote bien cerrado

y hasta el tobillo el vestido.

Hoy, con el traje subido

hasta la corva divina,

al doblar por una esquina

el pepillo piropeando

Le dice: Estás caminando

como la ola marina.

La mujer era otra cosa

decente y bien educada,

al orden acostumbrada

con rectitud asombrosa.

Hoy de manera pasmosa

y en franca conversación,

una niña con pasión

dice trivial y coqueta:

Fulana, ese chico aprieta

lo mismo que el marañón.

A una señora de edad

cuando en la calle paseaba,

el joven la saludaba

con mesura y seriedad.

Hoy que el cambio es de verdad,

cuando su paseo emprende

si algún sueño la sorprende

le dice al otro: Caramba,

no está tan fula la ocamba,

todavía se defiende.

Las chicas de ayer paseaban

con los ojos entornados

y con sus enamorados

ni siquiera conversaban.

Hoy, con la vista lo acaban

para darle el jaque mate

y aunque sea un disparate,

le dicen al periquito:

No me hagas sufrir, chiquito,

y atácame hasta fuerate.

Hermida en su mocedad,

de Placetas es notorio,

que fue atrevido tenorio

de gran popularidad.

Hoy a pesar de la edad

sigue siendo un buen jinete,

y una vieja de paquete

lo piropeó el otro día

diciendo: Estás todavía

mejor que Jorge Negrete.

Champión Hermida