Cultura

La Biblioteca Dawit Isaak fue creada y nombrada en honor al periodista y escritor sueco quien se encuentra detenido sin juicio en Eritrea desde 2001.

Situada en el Complejo del Archivo General de la ciudad de Malmö, al sur de Suecia, se han abierto las puertas de la Biblioteca Dawit Isaak para dar la bienvenida al público que desea conocer aquellos libros que han sido objeto de censura a lo largo y ancho del mundo.

El espacio fue creado y nombrado así, como homenaje al periodista y escritor sueco, quien se encuentra detenido sin juicio en Eritrea desde 2001 por criticar al régimen. Nacido en el país africano, Isaak fue galardonado en 2003 con el Premio de Libertad de Expresión otorgado por Reporteros sin Fronteras en Suecia.

En cada una de las estanterías de la biblioteca, reposan copias de obras que están o fueron censuradas, sin importar antigüedad o contemporaneidad. También figuran aquellas que pararon en una hoguera o creadas por autores exiliados, perseguidos o encarcelados.

Existe un apartado en el que también confluyen piezas musicales y obras teatrales que corren la misma suerte de los textos.

Algunos ejemplos destacables son Versos Satánicos, del escritor anglo-indio Salman Rushdie. Su libro fue considerado ofensivo por los líderes islámicos y en 1989 condenaron al autor a la pena de muerte por el entonces líder religioso de Irán, el ayatolá Jomeini.

Uno más es El Cuento de Ferdinando, de Munro Leaf; esta pieza fue prohibida por el régimen de Franco en España, considerándole como “propaganda pacifista”. En la Alemania de Hitler, todas las copias se incineraron.

De los inicios del milenio, figura la saga de libro del joven mago Harry Potter, creados por la autora británica J.K. Rowling; estos fueron censurados en algunos puntos de Estados Unidos y escuelas de los Emiratos Árabes Unidos, bajo pretexto de promover la brujería y el ocultismo.

Cada ejemplar cuenta con información sobre cuándo, dónde y por qué fue censurado. El objetivo de la biblioteca es ampliar la colección inicial de 1 mil 600 títulos, e invita al público a que mande sus postulaciones a través de las redes sociales o por vía mail.

Mientras esto sucede, de forma emotiva, una silla vacía en el recinto está en espera de ser ocupada por Dawit Isaak, de quien Amnistía Internacional, ha expresado que es un prisionero de conciencia, detenido de forma arbitraria de acuerdo a su posición política, por lo cual debería ser liberado sin condiciones.

Por La Redacción