Cultura

De acuerdo con el informe del ICOM, el 30.9% de los museos despedirá a una parte de sus trabajadores permanentes.

En días recientes, el Consejo Internacional de Museos (ICOM) ha presentado un informe en el que han recabado parte de los estragos adyacentes a la pandemia del coronavirus, que van desde la reducción de recursos y actividades, hasta el recorte de personal fijo y temporal.

Siendo la segunda encuesta realizada en tiempos de COVID-19 a sus miembros, la del mes de septiembre desvela que el 30.9 por ciento de las instituciones despedirá a una parte de sus trabajadores permanentes, y el 46.1 por cierto prescindirá de los temporales.

De los 900 museos encuestados, el 16 por ciento declaró que entre febrero y septiembre del 2020, han despedido por lo menos, a una cuarta parte del personal.

Ahora bien, de ese mismo universo, el 10.6 por ciento ha reconocido que, en casos extremos, han tenido que cesar a más de la mitad de su plantilla.

Norteamérica es hasta el momento la región con mayor número de despidos, superando al doble de lo cuantificado en Europa.

El informe también resalta que los más vulnerables son los autónomos, pues el 40.9 por ciento, declaró que se quedarán sin salario en próximos días.

Para el 68.5 por ciento participante en el estudio, aseguran que su principal fuente de ingresos anuales proviene de fondos públicos, y sólo un 25.8 por ciento de privados; paralelamente del gran total, el 33.8% afirma que la mayor parte del presupuesto lo generan directamente por su cuenta.

Con el cierre de recintos, la disminución de aforo y la expectativa a flote, el panorama es incierto.

Casi la mitad de los participantes auguran que perderán una cuarta parte de sus ingresos de 2020; ejemplo de ello son, el Museo Reina Sofía y el Museo del Prado, quienes han previsto una pérdida entre el 60 y 65 por ciento.

Se prevé la reducción de programa de actividades, exposiciones temporales y horas de apertura.

En el peor de los escenarios, en Europa alrededor de 250 museos esperan despedir trabajadores, mientras que, en América del Norte, el doble de esa cantidad.

La buena noticia, según el ICOM, es que la percepción de los encuestados sobre un posible cierre permanente de sus museos, ha bajado del 13 al 6.1 por ciento.

“El impacto va a ser grave y tendrá consecuencias duraderas en las finanzas de los museos, en su capacidad para llegar a su público y, por tanto, para cumplir con su función cultural, social y económica”, sostiene el organismo mundial.

Por Redacción Por Esto!