La Feria Internacional del Libro de Palacio Minería, auspiciada por la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de México (UNAM), llega a su edición número 42, la primera en modalidad virtual desde su establecimiento. Promocionará 60 actividades, distribuidas del 18 de febrero hasta el 1º de marzo en sus redes sociales (“FIL Minería” en YouTube y Facebook) y a través de su página web, donde se puede consultar el programa que reúne presentaciones de libros y revistas, conferencias en torno a la ciencia y la literatura, recitales y mesas redondas. Es la feria más antigua del país. En la Ciudad de México ya se le conoce como un clásico y uno de los eventos más significativos en la oferta cultural. “Eso nos exige que hagamos lo mejor posible”, comenta Rubén García, quien es parte del comité organizador.
En entrevista exclusiva con POR ESTO!, Rubén, encargado de la difusión mediática del evento, explica que la primera emisión digital de una feria caracterizada, entre otras cosas, por su locación física, conlleva múltiples retos. “El primero fue aceptar que no habría feria presencial. Hay una resistencia a hacerlo digital después de abrir las puertas a 130 mil personas y de armar un programa con más de mil 300 actividades. Tenemos trece salones en el Palacio de Minería, donde cada 45 minutos sucedía alguna actividad cultural. La crisis sanitaria nos hizo suprimir esto por el momento. Además, nuestro equipo es experto haciendo eventos presenciales; hacer algo digital es completamente distinto. Era muy difícil pasar todo el programa a la virtualidad”. El segundo desafío, comenta, fue la adaptación en sí, refiriéndose no sólo a los contenidos del evento, sino también a la preparación del personal e incluso a las modificaciones en su gestión financiera.
El equipo de la FIL Palacio de Minería, comenta, aprendió de otras instituciones que adaptaron sus eventos a las pantallas. Compartieron experiencias con los comités del Festival El Aleph y la Feria Internacional del Libro del Zócalo. “Esto permitió que la FIL Minería, que también ha dado asesoría gratuita a varias instituciones, entre ellas la Feria Internacional de la Lectura en Yucatán, se preparara para este evento”.
Pero hay cosas que no pueden planearse. “Otro reto es la incertidumbre”, comenta. “Hemos trabajado mucho los últimos meses, pero no sabemos cómo nos irá en la primera edición virtual. Sin embargo, estamos confiados en que el público nos verá y los medios darán cobertura”.
La primera edición digital busca, por ello, “transmitir el gusto por la lectura y los libros”. Para eso, cuentan con una atractiva oferta de eventos, entre ellos la presentación del libro El infinito en un junco: la invención de los libros en el mundo antiguo, escrito por Irene Vallejo, ganadora del Premio Nacional de Ensayo 2020 (España). También se presentará La misteriosa aventura del libro y el gato, una recopilación en voz de promotores culturales capitalinos que combina ilustraciones y un cuentacuentos. La ciencia aporta su propio espacio con la ponencia Mitos y realidades de las vacunas, liderada por la viróloga Susana López Charretón. “Con esto, nos gustaría que el público encuentre alguien confiable para conversar sobre este tema”, comenta Rubén, y añade: “Tenemos libros como Pandemia: memoria gráfica, con material de los fotógrafos de Proceso. Y, para redondear, estará la 6ª jornada de literatura del horror, dedicada a Amparo Dávila, con la presencia de Socorro Venegas y Vicente Quirarte”.
Además, se presentarán 12 cápsulas de video, una correspondiente a cada día del evento, que presentan conversaciones con autores como Ana Clavel, Hernán Bravo Varela, Rosa Beltrán, Benito Taibo, entre otros. Algunos de los temas tratados son la escritura en la vida personal y la profesión literaria durante la pandemia.
Rubén García, que forma parte del equipo -conformado por 10 personas- que hará posible la Feria, expuso su perspectiva sobre la digitalización: “Yo creo que la virtualidad ya estaba acá, sólo que no le habíamos dado el espacio y las circunstancias no lo habían permitido. Veo el futuro con ferias del libro híbridas, con actividades presenciales y con streamings, incluso si estás en África o Asia, con presentaciones que de otra forma serían muy complicadas. La tecnología ya está lista para tener esta conversación”.
Todo el material que se transmita como parte de la Feria seguirá disponible en sus redes incluso después de las fechas calendarizadas. El acceso es gratuito y no requiere registro previo.
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