LONDRES, Inglaterra, 23 de diciembre (AP).- La FIFA pidió que todas las ligas del mundo implementaran un procedimiento de tres pasos para responder a expresiones de racismo o intolerancia en los partidos. La Liga Premier inglesa no siguió la recomendación.
Ese desacato de los protocolos establecidos por la secretaria general de la FIFA Fatma Samoura mediante una carta enviada en julio a todas las federaciones nacionales ha generado confusión, en momentos en que el fútbol inglés lidia con las consecuencias de otro partido empañado por el racismo.
El Tottenham ha pedido que la Premier aclare los procedimientos que sigue, tras lo ocurrido el domingo en un derbi londinense, en que Antonio Rüdiger, defensa del Chelsea, reportó que varios hinchas locales lo habían insultado al emitir ruidos semejantes a los de un mono.
Poco después de la queja inicial de Rüdiger, se emitió un anuncio a los más de 61,000 espectadores congregados en el estadio del Tottenham: “Conductas racistas por parte de los espectadores están interfiriendo con el partido”.
Al ordenar que se hiciera esa advertencia, el árbitro Anthony Taylor siguió claramente el primer paso contemplado por el protocolo antirracismo de la FIFA y la UEFA. Los pasos siguientes contemplan la suspensión del partido y el eventual abandono de éste, si persisten las expresiones intolerantes.
Pero la Liga Premier tiene un plan de reacción de seis pasos, que no aporta a los árbitros la claridad brindada por las instrucciones de la FIFA y la UEFA, acerca de las medidas a tomar.