VILLAHERMOSA, Tab., 25 de julio (ESPECIAL/Juan Diego Casanova Medina).- La tormenta eléctrica durante el juego anunciaba una noche turbulenta para el equipo tabasqueño.
Así fue, porque mientras el cielo se iluminaba con el fenómeno meteorológico, en el campo de juego, la tormenta de trancazos, de todos los calibres, pulverizó el pitcheo de los Olmecas de Tabasco y los Leones de Yucatán se valieron de su poderoso rugido para doblegarlos 12x0 en un juego recortado a seis entradas, por no presentar el terreno de juego del Parque Centenario “27 de Febrero” las condiciones adecuadas para su reanudación.
De esta forma, el conjunto melenudo completó la barrida en la serie, la segunda en la segunda vuelta, la tercera de la temporada y extendió a tres su racha de triunfos consecutivos.
En pleno ataque del equipo “Choco”, en el fondo del séptimo episodio, con un tercio fuera y con corredores en la primera y segunda colchonetas, cayó un diluvio que obligó la suspensión del juego a las 22:46 horas.
Los aficionados corrieron en busca de un refugio para resguardarse de la lluvia y los peloteros hicieron lo propio a sus respectivas casetas. Cuando se iba a reanudar a las 23:45 horas, volvió a caer la lluvia y para colmo de males se registró un apagón que dejó sin iluminación el Estadio por lo que los ampáyeres decretaron la suspensión a las 00:05 minutos de este viernes.
El tercero de la serie fue diferente a los dos anteriores, en donde el duelo de pitcheo dominó hasta el inicio del último tercio del juego, nada más que el de los abridores de las fieras fue el más efectivo que el de sus pares de los Olmecas. Idem con el bullpen selvático que los dejó sin ninguna oportunidad.
En esta ocasión, las fieras no esperaron hasta la octava entrada para dar los zarpazos que los encaminó a la victoria.
Lo hicieron desde la segunda hasta la quinta entrada, en ésta última, sentenciaron la victoria con un jugoso racimo de siete carreras, que incluyó un par de bombazos.
Antes de ese explosivo ataque, los Leones se encargaron de atosigar, primero al abridor del equipo tabasqueño, el bajacaliforniano Marcos Machado (1-3), el perdedor, y luego a los relevistas, con salvaje ataque de 14 imparables.
El bestial rugido del quinto episodio, lo inició el mochiteco Sebastián Valle, quien abrió la tanda con su séptimo jonrón de la temporada; doble del sinaloense Walter Ibarra remolcó dos carreras, Jorge Flores, con imparable, remolcó la cuarta carrera y el norteamericano Xavier Scruggs, al primer disparo de Lenix “El Cañoncito” Osuna, hijo de Roberto Osuna, segundo relevista de los tabasqueños, coronó el ataque con jonrón de tres carreras, su octavo del año con las fieras.
El texano Jesse Estrada (7-1) ofreció una cátedra de pitcheo de 3 imparables en cinco sólidas entradas, en ruta a su séptimo triunfo.
Su segundo éxito de forma consecutiva, tuvo destellos similares al de su anterior apertura ante los Saraperos de Saltillo, en el Parque Kukulcán Alamo, al dejar al equipo norteño en tres imparables, los mismos que admitió ante la novena tabasqueña.
El primer jit del juego lo recibió en la segunda entrada y lo conectó el mochiteco Ramón Ramírez, quien le repitió la dosis en el quinto episodio, un doble que no trajo consecuencias y el del cuarto rollo corrió a cargo del guaymense Héctor Téllez. Completó su labor con un chocolate y su control estuvo puntual en la zona de bateadores al no conceder ninguna base por bolas.
Lo relevó el zurdo Miguel Peña, quien aceptó el último jit de los Olmecas que disparó en el sexto episodio el cubano Daniel Carbonell y estando en el cerrito Cristhian Prado, se suspendió el juego en el inning de las emociones.
Además de Scruggs, contribuyó en la ofensiva de los Leones, Walter Ibarra, de 3-1, con 3 producidas; José Juan Aguilar, de 4-3, dobles, con dos remolques y Sebastián Valle, Alex Liddi y Jorge Flores, con sendas carreras impulsadas.
Los Leones viajaron rumbo a Campeche para devolverle este fin de semana la visita a los Piratas, en el Estadio “Nelson Barrera Romellón”, en donde el cubano Yoanner Negrín buscará extender la racha de victorias del equipo melenudo.