Alan Pizaña, entrenador del equipo de triatlón Iron Heart, reportó la situación actual de los triatletas que continúan la reactivación de sesiones presenciales en la nueva normalidad del deporte. Por cierre de espacios aún no pueden entrenar natación hasta nuevo aviso.
Con casi dos meses de retomar gradualmente los entrenamientos presenciales de acuerdo a las limitaciones predispuestas en el Semáforo de Riesgo Epidemiológico por la Secretaria de Salud, el equipo de Iron Heart cuenta con el 75 por ciento de atletas activos en las sesiones de la nueva normalidad mientras que el resto de integrantes se mantienen con sesiones a distancia desde casa.
El head coach de Iron Heart detalló que ya hay un mayor número tanto de adultos, como niños que han regresado a los entrenamientos presenciales quienes comparten las sesiones con nuevos miembros que se han sumado a la activación física después de los últimos meses de distanciamiento social que implicó la suspensión de todas las actividades deportivas por la emergencia sanitaria.
El cierre de espacios por la pandemia también hizo que los equipos de triatlón se quedaran sin espacios para la práctica de la natación, una de las tres disciplinas que integran dicho deporte. En el caso de Iron Heart reportan que han buscado opciones para retomar estas sesiones pero ante los precios elevados para la renta de albercas los mantienen paralizados en esa modalidad.
“No hemos encontrado aún el lugar para retomar entrenamientos de natación, se tiene la opción del IMSS pero hasta enero y en la playa esta la opción de tomar las clases, pero hay riesgos por ser mar abierto, este fin de semana tuvimos un incidente por una picadura de levisa y el dolor que dejan es mucho como para exponer al riesgo a un niño”, detalló Alan Pizaña.
Por Emmanuel Sansores