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Tokio 2020 se rinde ante el Covid-19

TOKIO, Japón, 24 de marzo (AP-AFP).- Ni siquiera los Juegos Olímpicos pudieron resistir el efecto devastador del coronavirus.

Tras semanas de presiones, el Comité Olímpico Internacional tomó el martes la insólita decisión de posponer el mayor suceso deportivo del mundo, rindiéndose ante la realidad de una pandemia del coronavirus que tiene paralizada la vida cotidiana en todo el planeta y que había hecho virtualmente imposible montar la monumental cita en julio.

Los Juegos de Tokio, donde estaba prevista la participación de 11,000 deportistas provenientes de más de 200 países, iban a representar un costo de 28,000 millones de dólares en su organización. Debían inaugurarse el 24 de julio, pero ahora tendrán que desarrollarse en una fecha todavía no precisada de 2021.

Aun así, se seguirán considerando los Juegos de Tokio 2020, un gesto simbólico mediante el cual el COI busca que esta celebración deportiva se mantenga como un “faro de esperanza”.

“No pienso que nadie estuviera preparado realmente para que llegara este virus”, dijo el velocista estadounidense Noah Lyles, quien se perfilaba como uno de los astros en Tokio. “Si analizamos la historia olímpica veremos que usualmente la guerra era lo que impedía realizar los Olímpicos”.

Sólo la Primera y la Segunda Guerra Mundial habían obligado a cancelar los Juegos Olímpicos, que no pudieron realizarse en 1916, 1940 ni 1944.

Ahora, fue un virus microscópico, que ha causado estragos en todo el planeta y que ha frenado prácticamente toda la actividad deportiva, el que forzó algo que pareció impensable siquiera con el zika en Río de Janeiro 2016, los atentados que mataron a miembros de la delegación israelí en Múnich 1972, los boicots de Moscú 1980 y Los Ángeles 1984, o distintas amenazas de guerra: postergar los Juegos Olímpicos a un año impar.

En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus causa síntomas moderados, como fiebre y tos, que se desvanecen en dos o tres semanas. Para algunas personas, particularmente los ancianos e individuos con otros problemas de salud, el cuadro puede empeorar, incluso con neumonía o la muerte.

La pandemia infectó ya a 420,000 personas y mató a más de 18,000, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins.

El COI señaló que los Juegos “deben reprogramarse a una fecha que no sea en 2020 y a más tardar en el verano de 2021, para salvaguardar la salud de los deportistas, todos los involucrados en los Juegos Olímpicos y la comunidad internacional”,

Fue un anuncio que era esperado ante el cúmulo de presión por parte de deportistas, organizaciones deportivas y comités olímpicos nacionales que estaban nerviosos por la situación, todos enfrentando una coyuntura en la que los entrenamientos y torneos clasificatorios, así como los protocolos internacionales de dopaje, habían quedado trastocados sin remedio alguno.

La canadiense Hayley Wickenheiser, cuatro veces campeona de hockey y primera integrante del COI que criticó la reticencia del movimiento olímpico de posponer, afirmó que la decisión era “el mensaje que los deportistas querían escuchar”.

“A todos los deportistas: tomen un respiro, reagrupare, cuídense ustedes y sus familias. Ya les llegará su momento”, escribió Wickenheiser en Twitter.

El presidente del COI Thomas Bach y el primer ministro japonés Shinzo Abe conversaron por teléfono el martes por la mañana. Se pusieron de acuerdo, junto a un puñado de ejecutivos del COI y del comité organizador de Tokio, para tomar la decisión.

El coronavirus suma 375,000 contagios en todo el mundo, con cifras que se incrementan exponencialmente.

“En las circunstancias actuales y basándonos en la información brindada por la OMS (Organización Mundial de la Salud) hoy, el presidente del COI y el primer ministro de Japón concluyeron que los Juegos de la XXXII Olimpiada en Tokio deben reprogramarse a una fecha que no sea en 2020 y a más en el verano de 2021, para salvaguardar la salud de los deportistas, todos los involucrados en los Juegos Olímpicos y la comunidad internacional”, dijo el COI en una declaración.

Antes del anuncio, Abe dijo que Bach estaba de acuerdo con su propuesta de posponerlos por un año.

“El presidente Bach dijo que estar de acuerdo ‘ciento por ciento’ y nos pusimos de acuerdo para que los Juegos Olímpicos y Paraolímpicos de Tokio sean no más allá del verano de 2021”, señaló Abe, destacando que realizar los Juegos el año entrante será “la demostración de la victoria de los seres humanos contra los contagios de coronavirus”.

Aplazar el evento supone complicaciones logísticas como la disponibilidad de sedes en Japón, la alteración de los calendarios deportivos internacionales durante cualquiera que sea la nueva fecha seleccionada, el restablecimiento de los procesos de clasificación y otras consideraciones.

La decisión se tomó apenas horas después que los organizadores locales habían dicho que el relevo de la antorcha iba a continuar el jueves. Esos planes también cambiaron.

“De momento, la llama permanecerá guardada y a la vista en Fukushima”, dijo el presidente del comité organizador Yoshiro Mori.

El COI y los organizadores de Tokio dijeron que confían que la decisión de posponer la cita permitirá al mundo recuperarse de la pandemia.

“Los líderes están de acuerdo de que los Juegos Olímpicos en Tokio pueden ser un faro de esperanza al mundo durante estos momentos difíciles y que la llama olímpica se convierta en la luz al final del túnel en el cual el mundo se encuentra en este momento”, dijo el COI. “Por eso, se acordó que la llama olímpica se quede en Japón. También se acordó que los Juegos retengan el nombre de Juegos Olímpicos y Paralímpicos Tokio 2020”.

El Comité Organizador señaló que a pesar de que la pandemia por coronavirus retrasará el inicio de la justa olímpica por lo menos un año, se seguirán llamando Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

“Hemos decidido mantener la denominación original de Tokio 2020”, declaró el presidente del Comité Organizador, Yoshiro Mori en una conferencia de prensa llevada a cabo minutos después del anuncio oficial del cambio de fecha.

“El nombre seguirá siendo Tokio 2020. No hay cancelación, está claro. Y una meta, el verano de 2021, se ha concretado. Eso es también una guía concreta para los deportistas. Creo que es algo muy importante”, añadió Yuriko Koike, gobernadora de Tokio.

Mucho de la decisión de mantener el nombre se deben a factores económicos como los derechos de propiedad adquiridos y la mercancía oficial ya hecha.

La decisión es un alivio para los deportistas, dado que ya no tendrá que seguir adelante con sus entrenamientos en medio de condiciones imposibles, sin tener idea clara de para qué y cuándo deberían estar preparados.

“Agradecido de tener algo de certidumbre sobre los Juegos. Es una decisión monumental, pero me parece que es la correcta”, dijo el velocista británico Adam Gemili.

Una de las razones que explican por qué el COI se tardó en tomar la decisión fue el tratar de resolver la logística.

Muchas arenas, estadios y hoteles tenían contrato para unos Juegos que se habían programado entre el 24 de julio y el 9 de agosto. Reacomodar todo eso no es imposible, pero costará más dinero. Tokio ya había invertido 28.000 millones de dólares para montar la justa, según informes.

Y lo otro es el calendario deportivo internacional. Casi todas las 33 disciplinas en el programa olímpico tienen previstas competencias importantes, incluyendo mundiales, para 2021.

El más relevante de todos está en el atletismo. El estadio Hayward Field de la Universidad de Oregon ha sido renovado y ampliado, a un costo de 200 millones de dólares, para albergar el campeonato mundial el año próximo. Ahora, ese torneo podría ser pospuesto, cancelado o perder su envergadura si se realiza dentro de un periodo muy ceñido a los Juegos Olímpicos.

“Muchas cosas puedes pasar en un año, así que tenemos que meditar lo que tenemos que hacer”, dijo Toshiro Muto, el director ejecutivo del comité organizador. “Ha sido una decisión súbita”.

Presión demasiado fuerte

La sucesión de acontecimientos en los últimos días, que desembocaron en este aplazamiento del martes, ha venido en gran medida impulsada por las fuertes presiones recibidas en el COI para que tomara una decisión lo antes posible.

La poderosa Federación Internacional de Atletismo (World Athletics), que gestiona el deporte olímpico número uno, se alineó el lunes con la idea de un aplazamiento de los Juegos. Este martes celebró la decisión tomada de postergar el evento.

“Es lo que quieren los atletas y estamos seguros de que esta decisión dará a los atletas, a los directivos y a los voluntarios un poco de respiro y de claridad en esta situación inédita e incierta”, afirmó en un comunicado.

La Federación Internacional de Fútbol (FIFA) también celebró el aplazamiento por dar “prioridad” a la salud, mientras que la de natación (FINA) dijo estar dispuesta a cooperar y modificar las fechas de su Mundial de Fukuoka (Japón), previsto para 2021.

El atletismo ya había señalado el lunes que aplazaría su Mundial de 2021, previsto en Eugene (Estados Unidos), si debía hacerse hueco en el calendario a los Juegos Olímpicos.

La idea de celebrar los Juegos en las fechas previstas había generado en los últimos días una enorme resistencia.

La delegación estadounidense es tradicionalmente la más importante en los Juegos Olímpicos y su Comité Olímpico se había sumado a las peticiones de aplazamiento.

“Es lo correcto”, sentenció el Comité Olímpico Estadounidense este martes. “Vuestro momento esperará hasta que podamos reunirnos de nuevo a salvo”, añadió su directora ejecutiva, Sarah Hirshland, en una carta a los deportistas de su país.

La canadiense Hayley Wickenheiser, cuatro veces campeona de hockey y primera integrante del COI que criticó la reticencia del movimiento olímpico de posponer, afirmó que la decisión era “el mensaje que los deportistas querían escuchar”.

“A todos los deportistas: tomen un respiro, reagrupare, cuídense ustedes y sus familias. Ya les llegará su momento”, escribió Wickenheiser en Twitter.

La llama olímpica se queda en Japón

El relevo del fuego olímpico fue pospuesto el martes debido a que los propios Juegos de Tokio quedaron aplazados para 2021.

Los organizadores tenían la intención de proseguir con el relevo, a partir del jueves, pese a la propagación del coronavirus.

Pero poco después que el Comité Olímpico Internacional pospusiera oficialmente los Juegos, el presidente del comité organizador señaló que el relevo no iba a seguir.

“De momento, la llama quedará guardada y se mantendrá a la vista en Fukushima”, dijo Yoshiro Mori.

El relevo iba a comenzar en la prefectura de Fukushima, en el noreste de Japón, sin una torcha, gente que la portara y sin público.

Procedente de Grecia, la llama llegó el 12 de marzo.