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Box, deporte glorioso para Yucatán; el inicio de las grandes figuras

En este especial se recuerda a los grandes pugilistas yucatecos en la historia de Yucatán
"Un pugilista que entendió que este deporte no es de ver quien sangra más, sino el que demuestra el arte de pegar y no ser golpeado"
"Un pugilista que entendió que este deporte no es de ver quien sangra más, sino el que demuestra el arte de pegar y no ser golpeado" / Especial

El deporte con más lustro, el que mayor satisfacción le ha dado a Yucatán sin duda es el Boxeo, una disciplina que el pueblo ha adoptado desde las peleas de campeonato que salen en la televisión, esas donde las luces, la música y la mercadotecnia enmascaran la falta de talento, inclusive aquellas de barrio, de tinte popular donde el joven trata de salir adelante en un deporte lleno de trabas.

Para Yucatán, el deporte de las orejas de coliflor sigue siendo el sueño de muchos para salir de la pobreza, es aquel que en unos años, en forma fácil, aunque de fácil no tiene nada, se puede hacer millonario.

Box, el deporte glorioso para Yucatán: Conoce las figuras que hicieron historia

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Box, el deporte glorioso para Yucatán: Conoce las figuras que hicieron historia

Decenas de cuadras existen en Mérida y en el Estado, todas llenas de jóvenes con el mismo sueño, llegar a emular lo hecho por siete yucatecos, el ceñirse el cinturón que los acrediten como el mejor del mundo, y que en este especial recordaremos a los primeros tres.

El Maestro

Primero, y antes que nadie, sin demeritar los logros de los demás, hay que hablar del Maestro Miguel Canto Solís, su clase, su manejo del ring, su juego de pies y de cintura, lo llevaron a ser considerado uno de los cinco mejores boxeadores mexicanos de toda la historia.

Un pugilista que entendió que este deporte no es de ver quien sangra más, sino el que demuestra el arte de pegar y no ser golpeado, un esgrimista auténtico, dando cátedra cada vez que se subía al cuadrilátero, de ahí el apodo que sustenta.

Miguel Canto conquistó el título Mosca del Consejo Mundial de Boxeo el 8 de enero de 1975, derrotando en Sendai, Japón, al local Shoji Oguma, bajo las órdenes del más grande mánager que ha tenido este deporte en nuestro Estado, Jesús Cholaín Rivero.

Miguel sostuvo en su carrera 742 rounds en 74 combates; de las 18 peleas por un título mundial donde estuvo, 17 se resolvieron por decisión en aquellos tiempos en que duraban 15 asaltos.

Por su talento se hizo acreedor, hace ya muchos años, al nombramiento de Peleador del siglo entre los pesos mosca.

El primer Guty

Gustavo Guty Espadas Cruz nació el 20 de diciembre de 1954 en la colonia Quintero de Mérida, fue poseedor del Campeonato Mundial de peso Mosca de la Asociación Mundial de Boxeo.

Ganó el Campeonato de peso mosca de la Asociación el 2 de octubre de 1976, cuando noqueó al panameño Alfonso López en 13 rondas.

Hizo cinco exposiciones, cuatro exitosas, del título, éstos ante Jiro Takada, en Tokio, Japón; Alfonso López, en Mérida; Alejandro Santana, en Los Ángeles, California, Estados Unidos; y Kimio Furezawa, en Japón; en el quinto, en Caracas, Venezuela, dejó la corona al caer por decisión dividida el 12 de agosto de 1978 ante Betulio González.

Desafió dos veces más por títulos mundiales, aunque no tuvo éxito en ninguna; primero en Corea en 1979 ante el local Chan Hee Park; y el segundo en Tailandia 1984 ante un Payao Poontarat que lo noqueó en el décimo round; posteriormente se retiró.

Guty fue el primer Campeón Mundial en la historia en ver a su hijo imitarlo como tal; ello sucedió el viernes 14 de abril de 2000, cuando su primogénito, Gustavo Guty Espadas Jr. alzó el titulo

Espadas fue sin duda, el boxeador más temido de su división en todo el mundo en la década de los setentas, por su fuerte y dinamitera pegada, pero también por su fiereza, que era lo que rendía a sus rivales.

En una ocasión se habló de una plática formal para un choque entre él y Miguel Canto, con ambos campeonatos en juego, pero no fue posible alcanzar un acuerdo.

Doble campeón

Oriundo del Barrio Bravo de San Sebastián, Freddy Chato Castillo fue el primer mexicano en conquistar un Campeonato Mundial en peso Minimosca.

Se pueda dar el lujo de presumir que es doble excampeón Mundial, tanto en peso Mosca como en Minimosca, que pasó de ser un desconocido boxeador a convertirse en Rey Universal de ambas divisiones.

Nacido el 15 de junio de 1955, el gran personaje del Mundo boxístico vivió un infierno tras caer en el alcoholismo y hoy lleva una vida sencilla fuera de lujos y riqueza.

Siempre se distinguió como fajador, junto con Miguel Canto y Gustavo Guty Espadas, fueron los tres titanes del boxeo yucateco en los años setentas.

Se inició en el pugilismo a la edad de 16 años y en 1971 hizo su debut ganando por la vía rápida en cuatro capítulos a Guty Espadas; después de sostener 34 combates profesionales, el 19 de febrero de 1978, en Caracas, Venezuela, disputó el cetro Minimosca frente al local Luis Estaba, derrotándolo por nocaut en el episodio 14.

Su pegada era fulminante, todos le auguraban un largo reinado, pero se alejó del gimnasio descuidando su condición física después del triunfo, tres meses le duró el gusto de ostentar la corona; en mayo del mismo año perdió el cetro por decisión en quince asaltos ante el tailandés Netroni Vorasingh, en Bangkok.

El 24 de julio de 1982 tuvo otra oportunidad de disputar el campeonato Mundial, pero ahora en peso Mosca y fue ante el colombiano Prudencio Cardona, en Mérida, donde ganó por la vía de puntos en 15 episodios.

Pero nuevamente festejó en grande y en su primera defensa del cetro, el 6 de noviembre de 1983, en Los Ángeles, California, perdió por decisión ante el panameño Eleoncio Mercedes.

El récord en su carrera profesional fue de 68 combates, con 18 derrotas, 30 victorias por la vía rápida y el resto por decisión.

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RM

JG

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