El Volcán enmudeció ante una hazaña histórica del Atlético San Luis, que selló su pase a semifinales tras conseguir un heroico empate sin goles ante Tigres, respaldado en la ventaja de 3-0 obtenida en la ida. La figura indiscutible de la noche fue el portero Andrés Sánchez, quien coronó su actuación atajando un penal al goleador André-Pierre Gignac.
El guardameta chihuahuense, de 27 años, se convirtió en la pesadilla de los felinos al detener los 10 disparos a puerta de los 29 intentos que generó el equipo local. Su momento culminante llegó cuando, en los minutos finales, se lanzó correctamente para detener el penal ejecutado por el máximo referente de Tigres, sellando así la eliminación del tercer mejor clasificado del torneo regular.
La noche en el Universitario fue un despliegue de resistencia por parte del equipo dirigido por Domènec Torrent. Los potosinos, lejos de especular con su ventaja, plantearon un partido inteligente alternando una sólida defensa con peligrosos contragolpes liderados por Vitinho y Nájera, quienes mantuvieron en alerta constante a la zaga felina.
El conjunto de Veljko Paunovic, a pesar de dominar la posesión y generar múltiples aproximaciones, se encontró con un muro infranqueable en Sánchez, quien respondió con seguridad desde los primeros minutos cuando realizó una atajada crucial ante un mano a mano con Gignac.
Con esta clasificación histórica, el Atlético San Luis avanza a su segunda semifinal consecutiva, donde enfrentará a Rayados de Monterrey en busca de alcanzar la primera final en su historia desde su llegada al futbol mexicano bajo el respaldo del Atlético de Madrid.
AG