El Estadio Ciudad de los Deportes fue testigo de una de las semifinales más electrizantes en la historia reciente del futbol mexicano. América selló su pase a la final del Apertura 2024 tras imponerse 4-3 a Cruz Azul en un partido que tuvo de todo: estrategia, goles espectaculares, remontadas y un desenlace dramático.
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La victoria águila comenzó a gestarse desde el planteamiento de André Jardine, quien sorprendió con la inclusión de Jonathan dos Santos en una función híbrida entre líbero y mediocampista. Esta decisión, junto con la libertad otorgada a Alejandro Zendejas, quien se convirtió en una pesadilla constante para la defensa celeste, marcó el rumbo del encuentro desde los primeros minutos.
El encuentro vivió su punto de inflexión cuando Richard Sánchez, otra de las sorpresas tácticas de Jardine, anotó un golazo desde larga distancia que parecía sentenciar la serie. Sin embargo, La Máquina demostró su espíritu al conseguir una épica remontada que culminó con un espectacular gol de Amaury Morales para igualar momentáneamente el marcador.
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El destino, sin embargo, tenía preparado un último giro dramático. Un penal señalado sobre Erick Sánchez en los minutos finales permitió a Rodrigo Aguirre anotar el tanto decisivo, aunque su celebración le costó la expulsión y dejó al América con diez hombres para los últimos minutos.
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Este triunfo no solo representa el pase del América a su tercera final consecutiva, donde buscará un histórico tricampeonato ante Monterrey, sino que también simboliza el fin del brillante torneo regular de Cruz Azul, que vio desvanecer sus 42 puntos y el liderato general ante su némesis histórico en una noche que quedará grabada en la memoria de ambas aficiones.