La final de la Copa América 2024 entre Argentina y Colombia se vio marcada por un momento dramático cuando Lionel Messi, capitán y estrella de la Albiceleste, abandonó el campo entre lágrimas debido a una lesión muscular. Este incidente no solo afectó el desarrollo del partido, sino que también podría significar el final de una era para el fútbol sudamericano.
El primer indicio de problemas ocurrió en el minuto 35 del primer tiempo, cuando Messi sufrió un golpe en un choque con Santiago Arias. Aunque logró continuar jugando, era evidente que no estaba en plenas condiciones.
La lesión definitiva se produjo en el segundo tiempo, cuando Messi intentó perseguir al veloz atacante colombiano Luis Díaz. En ese momento, el astro argentino sintió un tirón en el muslo izquierdo que lo obligó a detenerse inmediatamente y pedir el cambio.
La imagen de Messi llorando en el banquillo, después de arrojar sus botines, conmovió a todo el estadio. Los aficionados, conscientes de que podrían estar presenciando el final de una era, respondieron con una ovación y cánticos de "¡Messi, Messi!" que resonaron en todo el Hard Rock Stadium de Miami.
Este incidente plantea serias dudas sobre el futuro de Messi en la selección argentina y en futuras ediciones de la Copa América. A sus 37 años, existe la posibilidad de que esta haya sido su última aparición en el torneo continental.