La Final de Salto Individual Ecuestre en los Juegos Olímpicos de París 2024 fue escenario de un momento de alta tensión este martes. Los espectadores en los majestuosos Jardines del Palacio de Versalles contuvieron la respiración cuando el jinete mexicano Andrés Azcárraga y su caballo Contendro 2 protagonizaron un incidente inesperado durante su participación.
El binomio azteca, que ya enfrentaba dificultades en su recorrido acumulando penalizaciones por fallos en obstáculos previos, se vio súbitamente en el centro de atención por razones ajenas a la competencia. Al aproximarse a uno de los saltos, Contendro 2 mostró una repentina resistencia, deteniéndose abruptamente frente al obstáculo.
Esta acción imprevista provocó que Azcárraga perdiera el equilibrio y cayera de su montura, generando un instante de ansiedad entre los presentes. Sin embargo, la situación no escaló gracias a la pericia del jinete mexicano, quien mantuvo el control de las riendas durante la caída, evitando así un desenlace potencialmente más grave.
Demostrando gran profesionalismo, Andrés se incorporó rápidamente, calmó a su caballo y abandonó la pista con dignidad. Aunque este incidente marcó el final de sus aspiraciones en la competencia, el binomio mexicano dejó una impresión de resiliencia y deportividad.
AG
