Después de ocho años de El diario de un vampiro, Ian Somerhalder vuelve con V-Wars a la pantalla chica con más colmillos y sangre, aunque esta vez, asegura, en un show más adulto que refleja la vital importancia del papel que juegan los científicos, los auténticos superhéroes de la actualidad.
“Los científicos son nuestros superhéroes y esa es la razón por la que quería interpretar a este hombre, una persona normal pero increíble”, explica en una entrevista con EFE Somerhalder, quien se mete en la piel del doctor Luther Swann en esta nueva serie que llega a la plataforma digital Netflix.
Y es que V-Wars plantea una compleja realidad en la que el cambio climático, y el consecuente deshielo de la Antártida, desemboca en una plaga que convierte a los hombres en vampiros, y que amenaza con acabar con la humanidad.
“El diario de un vampiro era ciencia ficción, fantasía, muy sexy, muy divertida. (...) V-Wars sucede en la actualidad, y cuenta problemas reales que afectan al mundo ahora”, aclara el actor estadounidense ante el evidente parecido entre las dos producciones.
Aunque el argumento del nuevo show, basado en los cómics V-Wars, de Jonathan Maberry, pueda parecer pura fantasía, para Somerhalder no queda tan lejos de la realidad.
“El descontrolado deterioro glacial, el derretir del permahielo, significa que la biomasa, las bacterias, los virus, los patógenos, van a quedar expuestos después de haber permanecido bajo el hielo miles de años”, indicó.
“Una vez todo eso esté expuesto, como ya está sucediendo, supondrá una preocupación importante para los científicos, ya que hablamos de patógenos con los que no nos hemos tenido que enfrentar desde que vivíamos en cuevas, o quizá nunca”, agregó.
“Podría empezar una pandemia que haga que la peste bubónica parezca una fiesta de varicela. No tenemos idea de lo que va a aparecer”, sentenció.
En concreto, el intérprete, que saltó a la fama con un papel en la serie de éxito Lost, es ese científico superhéroe que intenta salvar a la humanidad cuando la misteriosa enfermedad empieza a extenderse a la velocidad de la luz y que le enfrenta a quien hasta entonces había sido su mejor amigo, Michael Fayne (Adrian Holmes).
Un argumento que para Somerhalder, que no solo es el actor protagonista sino también productor ejecutivo y director de uno de los 10 episodios de V-Wars, expone y subraya muchos de los problemas de la sociedad actual.
“Fronteras, racismo, medicina, miedos, política, la política del miedo. Todas estas cosas con las que lidiamos en nuestros hogares, globalmente, están sucediendo en esta historia”, explicó. NUEVA YORK, EE.UU. (EFE)