La violinista Dagmar Turner, de 53 años, fue diagnosticada de un tumor en el cerebro en 2013. Atemorizada por perder su capacidad de tocar el violín cuando se lo extirparan, ha decidido tocar el instrumento durante la operación.
De este modo, los cirujanos podían estar seguros en todo momento de que no estaban dañando ninguna parte del cerebro que pudiera afectar al movimiento de sus manos o a su coordinación.
El tumor de Dagmar se localizó en el lóbulo frontal derecho de su cerebro, cerca de un área que controla el movimiento fino de su mano izquierda. El uso preciso y experto de esta mano es esencial para tocar el violín, ya que los dedos regulan la longitud de las cuerdas sosteniéndolas contra el diapasón, produciendo diferentes tonos.
Con información del Hospital King's Collage
Por Redacción Digital Por Esto!