La pandemia por COVID-19 ha obligado a muchas personas a permanecer en casa por más de tres meses, el confinamiento durante la pandemia ha cambiado nuestras formas de vivir, pues aún con el relajamiento de los contagios en algunas partes algunas personas sienten miedo de volver a sus actividades comunes.
No solo ir a trabajar, sino actividades cotidianas como la compra de víveres o inclusive caminar por la calle, estos síntomas están relacionados con el síndrome de la cabaña.
El síndrome de la cabaña es un conjunto de síntomas relcionados con el espectro ansioso que se manifiestan en personas que han pasado mucho tiempo en situaciones de aislamiento.
Estos síntomas son recurrentes en personas que trabajan en plataformas petrolíferas o submarinos; los expertos aclaran que los seres humanos tienden a crear rutinas para manejar las situaciones desconocidas, por lo que la rutina de permanecer en casa ha provocado que el sentirse obligados a salir provoqué cierto rechazo, pues salir implica exponerse a un riesgo.
Según algunos expertos, las personas con el síndrome de la cabaña tienden a generar pensamientos circulares negativos que provocan escenarios mentales catastróficos. Lo que contribuye a generar ansiedad.
Las personas más afectadas por el síndrome de la cabaña son las que tienen patologías previas como la depresión, la agoraforbia o la ansiedad social.
Además de que aquellos quienes han pasado el confinamiento solos pueden presentar mayores problemas para salir a la calle, pues sus habilidades sociales se encuentran en baja forma y se sienten desprotegidos.
La sobreinformación por el COVID-19 también puede aumentar el miedo de las personas a salir de casa, pues se generan incertidumbre con respecto a los contagios.
Los expertos coinciden en que está bien tener miedo pero que este no debe limitar la movilidad y las actividades de una persona al grado de inutilizarla socialmente, por lo que recomiendan intentar hacer cosas para combatir el miedo y poco a poco recuperar las rutinas diarias para poder continuar con la vida personal.
Por Redacción Digital Por Esto!
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