Como todos los domingos, Netflix estrenó un nuevo episodio de la segunda temporada de ‘Luis Miguel, la serie’. El capítulo pasado dejó un sabor amargo luego de la muerte del manager de Micky, Hugo Lopez. Lo cierto es que en esta entrega su ausencia se empieza a notar luego de que no hay un líder que tome las riendas del nuevo disco de ‘El Sol de México’.
Este problema se refleja en los problemas que enfrentan el gran Armando Manzanero con Kiko Cibrian para ponerse de acuerdo sobre la impronta musical del disco ‘Segundo Romance’. En medio de esto, Patricio Robles hace de las suyas para posicionarse como el mejor candidato para reemplazar al difunto López, Alex McCluskey se pone nervioso ante esta situación porque no le cae nada bien el publicista y quiere echarlo. Sin embargo Luis Miguel pide que se quede.
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Mientras tanto, Erika Camill regresa a México para ver a Luis Miguel luego de tan dolorosa pérdida, este le recrimina que no estuvo en el velorio de Hugo y la trata muy cortante, a lo que ella se va. Sin embargo, 'El Sol de México' se arrepiente y corre a buscarla, pensando que la había perdido, pero ella se encontraba escondida en el ascensor donde se besan apasionadamente.
Por otra parte, Matilde, la abuela madre de Luisito Rey, aparece nuevamente en el edificio de Luismi y lo extorsiona, si no se lleva a Sergio por las buenas, lo hará por las malas. Este camino implica que vaya a hablar con la prensa y revele lo de su hija, la distante relación que tiene con ella, la desaparición de Marcela y otras barbaridades más que ponen los pelos del cantante de punta.
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En cuanto a las épocas más actuales de la vida de Luis Miguel, Azucena quien lleva adelante la auditoría de los manejos financieros del cantante, descubre que el accidente que tuvo el artista en su oído se debió a que se compraron equipos de menor calidad por el mismo precio. Y la plata sobrante de ese contrato la obtuvo Mauricio Ambrosi, actual representante del cantante, que además está teniendo un trato muy sobreprotector con Michelle Salas. La hija del intérprete de 'O tú, o ninguna', casi se va a vivir a Miami ya que su padre casi no pasa la Navidad con ella.
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FDCA