El álbum Nevermind fue sin duda uno de los éxitos que llevaron a la fama a Nirvana, sin embargo, a más de 30 años de su lanzamiento la banda enfrenta una demanda por la discografía lanzada en 1991, pues el bebé de la icónica portada inició un proceso legal en contra de los músicos.
En una demanda presentada ante el tribunal federal de Los Ángeles, Spencer Elden, la persona que fue el protagonista de la portada del álbum de Nirvana, exige al menos 150 mil dólares a cada uno de los acusados que, de una u otra forma, considera que fueron partícipes de su aparición en la fotografía.
A casi tres décadas del lanzamiento de este álbum, el protagonista de la fotografía, alega que los miembros de la banda violaron las leyes estadounidenses de pornografía infantil y le causaron sufrimiento de por vida al distribuir su imagen por todo el mundo.
Asimismo, el hombre afirma en dicha denuncia que sus padres nunca firmaron una autorización que le permitiera a Nirvana usar la imagen, tomada en un centro acuático de Pasadena en 1990. Distribución del cual asegura, nunca recibió compensación.
Entre los demandados están los sobrevivientes de la banda, Dave Grohl y Krist Novoselic; Courtney Love, albacea de la herencia de Kurt Cobain; dos administradores de las propiedades de Cobain; Kirk Weddle, autor de la foto; el director de arte Robert Fisher; y varias compañías discográficas, algunas desaparecidas.
Según el documento, Elden denuncia que su "identidad y nombre legal están ligados para siempre a la explotación sexual comercial que experimentó cuando era menor de edad y que se ha distribuido y vendido en todo el mundo desde que era un bebé hasta la actualidad".
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AR