Florida, Estados Unidos, 30 de octubre (EFE).– Potencial asesino, Alexander Barter se sintió agradecido con las autoridades policiales que lo detuvieron antes de que el joven de 21 años de edad cometiera un crimen por su "sed de sangre". En ese sentido, el joven explicó que tenía deseos apenas irrefrenables de matar y comerse a un niño. Esta información fue difundida por un alguacil del este de Florida.
Alexander Barter fue detenido el pasado 19 de octubre en Texas como resultado de una investigación que se inició en Florida.
Barter pudo ser rastreado cuando un agente de la oficina del alguacil Wayne Ivey descubrió un mensaje suyo en internet. En el texto señalaba sus ansias de “probar la necrofilia y el canibalismo y saber qué se sentía después de quitarle la vida a otra persona”.
El alguacil definió al joven como el individuo “más enfermo, asqueroso y demente” con el que ha tenido que toparse.