PARIS, Francia, 30 de septiembre (AFP).- Francia dio un último adiós este lunes a su expresidente Jacques Chirac, que fue enterrado en la más estricta intimidad, tras haber recibido un solemne homenaje en presencia de unas 80 personalidades extranjeras, entre ellas Vladimir Putin.
Según deseo de su esposa Bernadette, Jacques Chirac reposa en el cementerio de Montparnasse, junto a su hija mayor Laurence, fallecida en 2016 y cuyo trágico destino fue el drama de su vida.
Fue una jornada de duelo nacional en Francia, con un minuto de silencio en escuelas y administraciones, y honores fúnebres militares y un servicio solemne en la iglesia de San Sulpicio presidido por el actual jefe de Estado, Emmanuel Macron.
La ceremonia religiosa empezó a las 12H00 locales (10H00 GMT) con la presencia de la familia de Jacques Chirac, que presidió Francia durante 12 años (1995-2007), y de jefes de Estado y de gobierno extranjeros.
“Había en nuestro expresidente, este hombre cálido, un verdadero amor por la gente. Se sentía tan cómodo en los salones del Elíseo como en el salón de la agricultura. Muchos al encontrarse con él se sentían tenidos en consideración”, declaró en su homilía monseñor, arzobispo de París.
Además de Putin, acudieron a los funerales los presidentes de Italia, Sergio Mattarella y Congo, Denis Sassou Nguesso, así como los primeros ministros de Líbano, Saad Hariri y de Hungría, Viktor Orban.
También acudieron mandatarios de la época en que Chirac estaba en el poder, como el expresidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
Numerosas personalidades de todo el mundo recordaron a Jacques Chirac desde el anuncio de su muerte, el jueves a los 86 años y tras varios años de enfermedad, entre ellos el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, y el expresidente y la ex secretaria de Estado estadounidenses, Bill y Hillary Clinton.
El presidente Putin lo describió como “sabio y visionario” y dijo que fue el dirigente extranjero que más lo impresionó durante su carrera.