CIUDAD DEL VATICANO, 30 de septiembre (AFP/AP).- El Papa Francisco manifestó su disposición a contar con creyentes, hombres y mujeres, a quienes confiará “un ministerio” dedicado a la lectura de la Biblia, una medida que promueve el papel de la mujer dentro de la Iglesia sin por ello abrir la puerta al sacerdocio.
Aunque con frecuencia se invita a las mujeres a leer textos durante la misa, no tienen una misión explícita otorgada por la Iglesia.
Francisco publicó este lunes una carta apostólica que establece “el domingo de la Palabra de Dios”, con el fin de ilustrar la Biblia a los fieles católicos.
El día dedicado a la Biblia no ha de ser “una vez al año”, advierte Francisco, “porque nos urge la necesidad de tener familiaridad e intimidad con la Sagrada Escritura y con el Resucitado, que no cesa de partir la Palabra y el Pan en la comunidad de los creyentes”, escribió.
Para el Pontífice argentino es fundamental hacer todo lo posible para capacitar a algunos fieles para que “anuncian la Palabra con la preparación adecuada”, agregó en el documento, conocido como “motu proprio”.
Un miembro de la Curia, encargado de aclarar el significado de esta carta papal, especificó que esos fieles laicos, especialmente entrenados, podrían ser tanto hombres como mujeres.
“Sabemos cómo sucede en nuestras iglesias: la primera persona disponible está llamada a leer”, explicó el obispo Rino Fisichella, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización.
“La palabra de Dios debe encontrar personas, mujeres y hombres, que sean capaces de una palabra genuina y una comprensión del texto sagrado para proclamarlo”, añadió Fisichella en una entrevista transmitida por el Vaticano.
En un sínodo dedicado a la Biblia realizado a fines de 2008, los obispos habían apoyado la creación de un “ministerio para los lectores” abierto a las mujeres.
Pero el Papa de la época, Benedicto XVI, no acogió esa propuesta.
La idea ahora es de contar con más hombres y mujeres, sobre todo en territorios aislados, donde se necesitan sacerdotes.
El tema será abordado durante el sínodo o asamblea de obispos de la Amazonia, que se abrirá el 7 de octubre en el Vaticano.
El documento preparatorio sugiere “identificar el tipo de ministerio ‘oficial’ que puede conferirse a las mujeres”.
Los religiosos se interrogan también sobre la posibilidad de ordenar sacerdotes a hombres casados, entre ellos “indígenas”. Idea muy criticada por los sectores católicos conservadores.
Jesuita atacado por defender a gays
Francisco se reunió en privado con un jesuita estadounidense que fue atacado por católicos conservadores de Estados Unidos por acercarse a los homosexuales, la evidencia más reciente de la voluntad del Pontífice de ignorar la crítica del ala derecha a favor de sus prioridades pastorales.
El Vaticano puso en la lista de actividades del lunes del Pontífice la audiencia con el reverendo James Martin. Como sólo algunas de las reuniones privadas de Francisco se anuncian, fue una clara señal de que el Papa quería que se diera a conocer, el mensaje implícito fue un voto de confianza al ministerio de Martin.
A Martin, autor de “Tender un puente”, un libro sobre cómo la Iglesia católica debería acercarse más a la comunidad LGBT, le han cancelado varias presentaciones en Estados Unidos debido a la presión de grupos conservadores que se oponen a su trabajo. Sin embargo, bajo el pontificado de Francisco, el Vaticano lo ha recibido de buena gana y lo designó como asesor de comunicación, dándole un espacio para hablar en la cumbre de la familia de 2018 patrocinada por la Santa Sede y ahora con la audiencia privada.
Pagan 67 millones a 338 víctimas
La Archidiócesis de Nueva York pagó 67 millones de dólares a 338 víctimas de abusos sexuales en casos en los que hubo clérigos o personal de la Iglesia implicados, anunció este lunes la exjueza Barbara Jones, quien realizó una auditoria externa a pedido de la Iglesia.
Jones ofreció estos datos en una rueda de prensa, conjunta con el arzobispo de Nueva York, en la que presentó las conclusiones de una auditoría que llevó a cabo sobre “las políticas y los procesos” de la archidiócesis neoyorquina respecto a las acusaciones de abusos sexuales que han salpicado a la Iglesia católica en todo Estados Unidos.