LA HABANA, Cuba, 12 de noviembre (EFE).- Lo que el Gobierno de España consideraba una anomalía en la relación bilateral con Cuba, que ningún monarca español hubiera realizado una visita de Estado a este país, empezó a ser historia con la llegada a La Habana del rey Felipe VI junto a la reina Letizia.
El hecho de que se celebraran el domingo elecciones generales en España no impidió que finalmente se llevara a cabo este viaje, que se enmarca en la conmemoración del 500 aniversario de la fundación de la capital cubana.
En todo ese tiempo ningún rey de España había pisado suelo cubano en un viaje de estas características, aunque el anterior jefe del Estado, Juan Carlos I, sí estuvo en La Habana con motivo de la Cumbre Iberoamericana de 1999.
Tantos años de espera han ayudado a que Felipe VI y doña Letizia protagonicen una cargada agenda con actos de carácter institucional, económico y cultural.
Cuba era también el único país iberoamericano que no había visitado don Felipe ni como rey ni como príncipe de Asturias, con lo que esta circunstancia aporta a este viaje una significación añadida.
La conmemoración del 500 aniversario de la capital cubana se consideró que era el momento propicio para hacer realidad la visita real, aunque esta decisión ha provocado críticas de los partidos de centroderecha.
Hablan “de todo”
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, dio la bienvenida este martes a los reyes Felipe y Letizia en una visita “muy ansiada” a la isla, la primera de carácter bilateral de un monarca y en la que, según el Gobierno español, se habló “de todo”, incluido de derechos humanos.
Díaz-Canel recibió a don Felipe y doña Letizia en la sede del Consejo de Estado, al comienzo de un viaje que pretende terminar de normalizar la relación política después de etapas de desencuentros.
Como es tradicional en las visitas de mandatarios extranjeros, la jornada arrancó con una ofrenda floral ante el memorial del héroe de la independencia cubana, José Martí, y la imagen de los líderes revolucionarios Ché Guevara y Camilo Cienfuegos.
“En cordial encuentro, reconocimos las positivas relaciones bilaterales existentes, basadas en históricos lazos familiares y culturales que fortaleceremos”, dijo en su cuenta de Twitter el mandatario cubano, quien transmitió a los reyes que su visita era “muy ansiada”, según el Palacio de la Zarzuela.
Durante la media hora que se prolongó la reunión, se habló “de todo”, según explicó a los medios el ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, tras el posterior paseo que los reyes dieron por el casco histórico de La Habana.
“España no podía faltar a esta cita histórica”, afirmó el ministro de Exteriores.
La situación de los derechos humanos es uno de los asuntos que forma parte de la agenda política entre España y Cuba desde hace varios años.
En presencia de los dos jefes de Estado, se firmó el nuevo acuerdo de cooperación para el período 2019-2022, al que España va a destinar 57,5 millones de euros.
El acuerdo se adapta al nuevo contexto político y económico de Cuba, que afronta la peor crisis de los últimos años debido a los problemas de suministro de Venezuela, su principal proveedor de petróleo, y el endurecimiento del embargo de Estados Unidos.
Este miércoles, Felipe VI hará dos intervenciones, una ante la colectividad española y la segunda, la de más calado, en la cena de devolución ante el presidente cubano.