Afuera de la escuela, padres de alumnos que todavía se encontraban escondidos dentro del edificio, a la espera de que la policía dijera que era seguro salir, aguardaban impacientes mientras se comunicaban por teléfono con sus seres queridos.
Estados Unidos, 15 de noviembre (Telemundo).- Denzel Abesamis estaba estacionando su auto frente a la escuela secundaria Saugus , en Santa Clarita, California, donde cursa el último grado, cuando vio que sus compañeros corrían como queriendo escapar. Eran las 7:40 en California. “Automáticamente di la vuelta para irme, porque sabía que algo malo estaba sucediendo”, dijo el estudiante al diario Los Angeles Times.
Una amiga que estaba escondida en un aula con otros cinco estudiantes habló por teléfono con él y le dijo que había un tirador activo en el edificio. “Siempre me ha preocupado que algo así pudiese suceder”, dijo Abesamis.
Dentro, un joven que acababa de cumplir 16 años este jueves disparó en contra de sus compañeros, hiriendo a tres y dejando a otros dos muertos, según las autoridades del condado de Los Ángeles. Luego se disparó a sí mismo en la cabeza en lo que las autoridades han descrito como un intento fallido de suicidio.
Poco después la escuela estaba rodeada de policías, paramédicos y ambulancias. Seis heridos de bala, incluido el atacante fueron trasladados al hospital Henry Mayo, informó el alguacil Alex Villanueva. Pero dos de ellos murieron mientras los atendían los médicos.
Los primeros en llegar a la escena fueron tres policías con familiares en la escuela que estaban fuera de servicio.
“Esto es una tragedia por donde se le quiera mirar, pero si hay algo positivo es que nuestro personal, aunque estaba fuera de servicio atendió la emergencia de inmediato”, dijo Villanueva durante una conferencia de prensa la tarde del jueves.
Unos estudiantes son escoltados afuera de la Escuela Secundaria Saugus luego de un tiroteo. Foto: Marcio Jose Sanchez, AP
LOS PADRES
Afuera de la escuela, padres de alumnos que todavía se encontraban escondidos dentro del edificio, a la espera de que la policía dijera que era seguro salir, aguardaban impacientes mientras se comunicaban por teléfono con sus seres queridos.
“No he visto a mi hijo, pero hablé con él, está bien”, dijo la madre de un estudiante de tercer año que estaba esperando junto a muchos otros familiares cerca de una iglesia cercana. “Todo lo que dijo fue que estaba entrando en clase cuando alguien comenzó a disparar”, explicó a un canal local, según recogió la agencia de noticias Agence French Press.
Joy Songcuan, padre de un alumno de primer grado de la secundaria Saugus, recibió un mensaje de texto escalofriante de su hijo a las 8:02 am, según Los Angeles Times.
“Estoy bien. No te preocupes”, rezaba el texto en la pantalla del celular. Songcuan no sabía de qué hablaba. “Hay un tiroteo”, dijo su hijo Karl en un segundo mensaje.
Las horas siguientes fueron un calvario para los padres, en particular para Songcuan, quien a mediodía seguía sin poder ver a su hijo. Usando una aplicación del teléfono para rastrear su ubicación, descubrió que Karl se encontraba cerca de la oficina del director.
Su hijo estaba vivo. Era uno de los 20 alumnos en una escuela de dos mil 400 que todavía no podían salir. La policía los estaba interrogando por haber sido testigos oculares del tiroteo.
“Yo también te amo”, le respondió Karl en un mensaje, quien fue descrito por su padre como un adolescente de 14 años de pocas palabras y reacio a las muestras de afecto, que debía estar pasando por un momento que seguramente lo marcaría de por vida.
LAS VÍCTIMAS
Los estudiantes que murieron fueron una niña de 16 años y un niño de 14 años. Todas las víctimas asistían a la escuela secundaria Saugus en Santa Clarita. Aún no han sido identificadas por las autoridades.
Otros tres estudiantes, dos niñas, de 14 y 15 años, y un niño de 14 años, también fueron baleados en el patio de la escuela antes de que comenzaran las clases el jueves, dijeron las autoridades.
Varias personas se reúnen alrededor de un asta adornada con velas y globos de colores azul, dorado y blanco, representativos de la Escuela Secundaria Saugus. Foto: Stefanie Dazio, AP
“Odio que Saugus se agregue a los nombres de Columbine, Parkland, Sandy Hook, pero es una realidad que afecta a todo el país, algo con lo que tendremos que lidiar”, dijo el alguacil Alex Villanueva en una conferencia de prensa, después de descubrir que un segundo estudiante había muerto.
Más tarde, Villanueva confirmó que una de las víctimas se encontraba en condición grave en el hospital. El presunto tirador también se encontraba grave.
EL SOSPECHOSO
El adolescente de 16 años que abrió fuego contra sus compañeros en Saugus ha sido identificado por múltiples fuentes policiacas consultadas por la cadena NBC como Nathaniel Tennosuke Berhow.
Los investigadores creen que el sospecho actuó solo. Pero todavía no han determinado un motivo para el ataque.
El alguacil dijo que el joven usó un arma calibre .45 semi automática que sacó de su mochila. Tras disparar a cinco estudiantes, guardó la última bala para sí mismo y se disparó en la cabeza, pero logró sobrevivir y está siendo tratado en el mismo hospital que las demás víctimas.
Aparentemente el sospechoso publicó un mensaje en la red social Instagram antes de la matanza, donde escribió: “Hoy será un gran día en Saugus”.
Más tarde, después de que el atacante se disparara en la cabeza, alguien borró el mensaje, dijo Paul Delacorte, director asistente de la oficina del FBI (Buró Federal de Investigaciones), quien dijo que no podía confirmar si esa cuenta de Instagram en efecto pertenecía al sospechoso.
Delacorte agregó que por el momento no había indicios de que el sospechoso actuara como parte de un grupo o en nombre de alguna ideología.
En imagen tomada del video proporcionado por KTLA-TV, paramédicos trasladan en una camilla a una persona herida durante un tiroteo en la Escuela Secundaria Saugus de Santa Clarita, California. Foto: KTLA-TV vía AP
Villanueva dijo que no tenían indicios de que el agresor tuviera relaciones con las víctimas, “más allá de que todos pertenecían a la misma escuela”. La escuela Saugus y todo el distrito escolar estarán cerrados mañana.
El acto de violencia ha dejado perplejos a quienes conocían al presunto autor de la masacre.
“Es una locura”, dijo a Los Angeles Times Ryan McCracken, un joven de 20 años que vivía en la casa de al lado del sospechoso. “Era un chico callado y no vi esto venir”. McCracken recordó que los dos solían jugar juntos en la casita del árbol, pero tenía al menos dos años que no se veían.
Adrian Soto, un alumno de la secundaria Saugus que conoció al sospechoso por muchos años, con quien convivía en el equipo de atletismo y los boy scouts, dijo que era la última persona que hubiera imaginado que cometería un acto tan horrible, según el diario citado.
“Estoy perplejo y buscando respuestas, la razón por la que todo esto sucedería, tantas preguntas a las que nadie tiene una respuesta”, dijo Soto. Una vecina citada por Los Angeles Times dijo que la familia del sospechoso había perdido recientemente a un ser querido. Según un obituario en internet, el padre de Berhow, Mark, murió de un infarto en 2017. “Era un scout, estaba en la pista de atletismo y era un niño muy dulce, muy considerado”, dijo la mujer refiriéndose al sospechoso. “No entiendo la psicología”.
TODO PASÓ EN 16 SEGUNDOS
Siguen sin conocerse las razones que tuvo Nathaniel Berhow para disparar contra sus compañeros de la escuela secundaria de Saugus, al sur de California. El joven de 16 años mató a dos adolescentes y dejó heridos a otros tres antes de intentar quitarse la vida. Pero la Policía no ha podido encontrar los motivos que tuvo para desatar un nuevo episodio de ataque armado contra estudiantes en Estados Unidos.
Un día después del tiroteo, las autoridades informaron que los investigadores han realizado más de 40 entrevistas, pero siguen sin conocer los reales motivos que tuvo el joven, que ayer estaba de cumpleaños.
En solo 16 segundos Berhow acabó con la vida de una joven de 16 y un muchacho de 14, además de herir a otros tres estudiantes, de entre 14 y 15 años, en un ataque ocurrido a las 7:30 am (hora local) de este jueves en la secundaria Saugus, en Santa Clarita, 30 millas al Noroeste de Los Angeles.
El centro médico Holy Cross que atendió a dos de las adolescentes heridas entregó hoy información sobre su estado, asegurando que ambas podrían dejar el hospital en uno o dos días. Una menor de 15 años recibió una herida de bala en el abdomen lo que requirió una cirugía, mientras que la otra, de 14, recibió un impacto en el hombro y otro en el abdomen, pero afortunadamente sus heridas son superficiales y se encuentra en buen estado.
Barhow, en tanto, sigue en condición crítica luego de autoinfligirse un disparo en la cabeza, en lo que fue catalogado por el sheriff Alex Villanueva como un intento de suicidio. Sin embargo, hasta el momento no se ha entregado mayor información sobre su estado.
Según explicó la autoridad, el joven utilizó un arma calibre .45 semiautomática. “Le quedó una sola bala y esa bala la usó en su cabeza”, dijo Villanueva.
Quienes lo conocían, lo describen como un joven “solitario, calmado, un buen muchacho. Sus padres eran muy amables. Esto fue inesperado”, según declaraciones de un vecino de Barhow.