En torno a la noticia

Alfredo García

Sufrida Palestina

El funesto período de la alianza entre el presidente George W. Bush y el primer ministro israelí Ariel Sharon (2001-2006) amenaza con repetirse ante el avance de las políticas racistas y excluyentes del presidente Donald Trump y el primer Ministro israelí Benjamin Netanyahu.

El pasado miércoles Nicolai Mladenov, enviado de la ONU para el Medio Oriente, en una intervención ante el Consejo de Seguridad, advirtió que la perspectiva de una paz duradera entre palestinos e israelíes “se está desvaneciendo día a día” en medio de un auge de violencia y radicalismo. “Los extremistas están en alza otra vez y el riesgo de guerra sigue acechando. Para que los israelíes y los palestinos vuelvan a la senda de una solución pacífica del conflicto, lo primero que hace falta es liderazgo”, aseguró el diplomático.

La dramática advertencia del alto funcionario de la ONU tiene que ver con la reciente alianza de Netanyahu y una coalición formada por Poder Judío, (partido central de los colonos en Cisjordania), la Unión Nacional (ultraderecha nacionalista religiosa) y seguidores de la extremista organización Kach para las próximas elecciones legislativas del 9 de abril, a los que prometió dos carteras ministeriales (Educación y Vivienda) a cambio de su apoyo en la próxima legislatura del Parlamento.

El partido Poder Judío es liderado por el ex diputado de ultraderecha Michael Ben Ari y seguidores del partido Kach, como Benzi Gopstein, líder del grupo extremista Lehava. “El pacto (coalición electoral) servirá para impedir el establecimiento de un Gobierno de izquierdas, Dios nos libre”, anunció en un comunicado Poder Judío.

Kach fue un partido israelí nacionalista-religioso, fundado por el rabino norteamericano, Meir Kahane, que tuvo presencia parlamentaria en Israel entre 1984 y 1988 hasta que una ley electoral vetó se presentara a nuevos comicios a causa de su ideario racista. Kahane fue asesinado el 5 de noviembre de 1990, al terminar un discurso en un hotel de New York. Desde entonces el Kach fue incluido en la lista de organizaciones terroristas del gobierno de EU, la Unión Europea y Canadá.

Los herederos de la ideología extremista Kach proclaman la exclusión en la sociedad israelí de los no judíos (árabes y cristianos) por considerarlos ciudadanos de segunda categoría, el desplazamiento forzoso de la población palestina a Jordania, la prohibición de los matrimonios de religión mixta y el establecimiento de un gobierno teocrático.

La Unión Nacional fundada en 1999 es un partido ultraderechista, nacionalista-sionista, resultado de la alianza entre las agrupaciones derechistas, Moledet, Tzkuma y el Partido Nacional Religioso Sionista.

En oposición a Netanyahu y su coalición ultraderechista se constituyó la alianza de los partidos de centro-izquierda, liderados por el ex general Benny Gantz y el ex ministro de Finanzas Yair Lapid, con un programa centrado en asuntos sociales y de seguridad. Ambos dirigentes acordaron una lista conjunta de candidatos a la legislatura, donde aparecen los ex jefes del Ejército, Moshe Yaalon y Gabi Ashkenazi, así como Avi Nissenkorn, líder de la federación sindical israelí, Histadrut. Las encuestas sitúan la coalición de ultraderecha y la alianza de centro-izquierda, en un empate técnico.

Sin embargo la mayor señal de amenaza para el pueblo palestino fue la inesperada renuncia de la ex ministra y diputada Tzipi Livni, defensora de la solución de los dos Estados y aspirante al cargo de primer Ministro, quien reconoció que “su programa no había calado en el electorado” al no superar su Partido Hatnuah el 2% de las encuestas sobre intención del voto para las próximas elecciones legislativas.