Internacional

Segundo apagón del mes

CARACAS, Venezuela, 25 de marzo (AP/EFE/AFP/REUTERS).- Algunas calles de Caracas se desbordaban el lunes con centenares de venezolanos que se lanzaron a las aceras para caminar tras la suspensión del servicio del metro, que fue ocasionado por un nuevo apagón.

Esta falla —la segunda en lo que va del mes— también provocó congestionamiento vial debido a la ausencia de semáforos.

La situación se reportó en la capital venezolana pasada la una de la tarde. Medios locales informaron que al menos en nueve de los 23 estados no había luz.

Por la tarde el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, indicó que la falla es consecuencia de un “nuevo ataque” que se realizó al centro de transmisión y de carga de la central hidroeléctrica Simón Bolívar, en la represa suroriental del Guri, pero no ofreció detalles. Agregó, en una transmisión desde el palacio de gobierno, que a pesar de que este “ataque tuvo características similares al anterior, respondimos de manera oportuna. Y se ha restablecido el servicio en casi todo el territorio nacional”.

Casi tres horas después de la falla, el servicio comenzó a restablecerse progresivamente en la capital y regiones centrales como Miranda, Carabobo o Aragua.

Entrada la noche, edificios residenciales en Caracas y su periferia -donde viven unos seis millones de personas- estaban iluminados y el alumbrado público y los semáforos volvieron a funcionar, constató la AFP. Sin embargo, ciudadanos en otros estados denunciaron que continúan a oscuras.

El ministro vinculó el incidente a un plan “terrorista” que denunció el pasado fin de semana en el que resultaron aludidos el jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó; su jefe de despacho, Roberto Marrero, que fue detenido la semana pasada, y el dirigente opositor Leopoldo López, que está bajo arresto domiciliario desde hace dos años tras ser condenado a casi 14 años de cárcel por llamar a una protesta en la capital en 2014.

“La intención de este estado mayor del terrorismo es una intención de persistir en sus acciones agresivas, en sus acciones ahorcamiento financiero”, dijo Rodríguez al informar la detención del abogado Juan Planchart, quien ha sido vinculado a un supuesto plan de la oposición para tomar el control de 1,000 millones de dólares del Estado venezolano.

Al condenar el nuevo apagón, Guaidó dijo en su cuenta de Twitter que el “régimen quema medicina y comida, no puede ni mantener electricidad, no hay agua y habla de victoria”. El dirigente atribuyó el apagón a una “sobrecarga en el sistema de subestaciones, por una falla eléctrica en la línea San Jerónimo - La Horqueta - La Arenosa”.

“Mienten para no asumir su responsabilidad en esta crisis homicida. Y además están poniendo en riesgo lo poco que queda en pie de la infraestructura eléctrica nacional”, expresó el líder opositor, que ha sido reconocido como presidente encargado de Venezuela por unos 60 países, al rechazar los señalamientos del ministro de Comunicación.

Hace menos de tres semanas en la capital venezolana y la mayoría de los estados del país se registró un apagón general que se extendió por cuatro días. Las autoridades atribuyeron la falla a un “ciberataque” que se realizó en la represa suroriental de Guri, que genera más del 60% de la electricidad que se consume en el país, con el apoyo de Estados Unidos.

La versión del gobierno fue descartada por un informe de un académico de la Escuela de Ingeniería Eléctrica de la estatal Universidad Central de Venezuela que sostuvo que el apagón nacional fue generado a raíz de un incendio en una subestación en el estado suroriental de Bolívar que provocó un excesivo aumento en la temperatura de tres líneas de transmisión y una “súbita pérdida de potencia en la planta de generación de Guri”.

“Los sistemas de control de la planta Guri actuaron y desconectaron los generadores gradualmente para controlar la frecuencia eléctrica”, señaló el estudio al asegurar que la parada de esa instalación provocó un efecto “dominó” en las plantas de Macagua y Caruachi, también ubicadas en el estado de Bolívar. Las autoridades no han hecho comentarios sobre el estudio.

Temor en la población

Los habituales apagones en Venezuela impactan la atención en los hospitales, el suministro de agua y la banca electrónica, vital por la escasez de efectivo que provocan la hiperinflación y la devaluación de la moneda local.

“Esto es ya demasiado (...). Las carnes, los pollos, todo lo que es comida se daña, es pérdida total”, se quejó Leo, de 19 años, empleado de un restaurante del este de Caracas.

A su lado una decena de trabajadores se sentaron en la calle a esperar resignados.

“Ahora debemos caminar toda Caracas porque no hay metro”, se quejó Alejandra, cajera del restaurante, a AFP. Cientos de personas volvían pie a sus casas al final de la tarde y los pocos buses disponibles estaban atestados.

La emergencia revivió los temores a un apagón como el del 7 de marzo, que obligó a suspender la jornada laboral durante una semana, así como las clases.

Tensión EE.UU.-Rusia

Guaidó prepara una movilización nacional hacia el palacio presidencial de Miraflores en Caracas para asumir su control, en fecha por definir, y no descarta pedir al Legislativo que autorice una intervención militar extranjera.

Washington, su más ferviente aliado, tampoco excluye una acción militar para sacar a Maduro, a quien se ha propuesto estrangular económicamente con sanciones como un embargo petrolero que se hará efectivo el próximo 28 de abril.

En medio de la presión internacional para que Maduro abandone el poder, Rusia y China, principales acreedores de la deuda externa de Venezuela (estimada en 150,000 millones de dólares), se han convertido en los grandes aliados del presidente socialista.

El pasado sábado dos aviones de las Fuerzas Armadas rusas aterrizaron en el aeropuerto internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas, transportando personal militar y equipos, confirmó la agencia estatal rusa Sputnik, desatando un cruce de acusaciones entre Washington y Moscú sobre injerencia en la crisis venezolana

OEA: “Inadmisible” la llegada de tropas rusas

La Organización de Estados Americanos (OEA) calificó este lunes de “inadmisible” la llegada de tropas rusas a Venezuela para prestar apoyo al “régimen usurpador” del presidente Nicolás Maduro, una acción que, señaló la institución, viola además la constitución del país suramericano.

Detienen a militar venezolano con 25 pasaportes

El teniente coronel venezolano Édgar Lugo Pereira, quien trabaja en la Cancillería de ese país, fue detenido en el aeropuerto de Bogotá con 25 pasaportes y más de 40,000 dólares, y posteriormente fue expulsado por las autoridades colombianas, informaron este lunes fuentes oficiales.

La detención del ciudadano venezolano se dio el día de ayer al interior de la zona de emigración del Aeropuerto Internacional El Dorado, cuando pretendía viajar, en compañía de dos mujeres, hacia Caracas, haciendo escala en Ciudad de Panamá”, indicó Migración Colombia en un comunicado.

EE.UU. “no se quedará

de brazos cruzados”

El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, advirtió hoy a su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, de que su país no permanecerá de brazos cruzados mientras Rusia “exacerba” la tensión en Venezuela, durante una conversación telefónica que mantuvieron este lunes.

“El secretario (Pompeo) dijo al ministro ruso de Exteriores Lavrov que ni Estados Unidos ni los países regionales permanecerán de brazos cruzados mientras Rusia exacerba las tensiones en Venezuela”, reveló el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Robert Palladino, en un comunicado.

ONU advierte a Maduro

El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió este lunes al Gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de que reprimir a la oposición sería “un error” y podría terminar por tener “consecuencias dramáticas” para el país.