Internacional

Reino Unido y Alemania advierten sobre el peligroso conflicto EE.UU.-Irán

BRUSELAS, Bélgica/BERLIN, Alemania, 13 de mayo (Reuters/AFP/EFE).- Irán y Estados Unidos podrían desencadenar un conflicto accidental en una región inestable como el Golfo Pérsico, dijo el lunes el ministro de Asuntos Exteriores de Reino Unido, mientras el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, sostenía negociaciones en Bruselas con las potencias europeas.

El presidente Donald Trump está tratando de aislar a Teherán apuntando a sus exportaciones de petróleo tras retirarse de un acuerdo de 2015 destinado a frenar el programa nuclear de la república islámica. Washington también fortaleció la presencia militar estadounidense en el Golfo para presionar a Irán.

Si bien la Unión Europea comparte algunas de las preocupaciones sobre Irán, incluida su participación en el conflicto en Siria, aún respalda el acuerdo nuclear de 2015, afirmando que lo hace por sus propios intereses de seguridad.

Reino Unido, Francia y Alemania son signatarios del acuerdo del 2015 y sus ministros de Relaciones Exteriores sostuvieron reuniones por separado el lunes en Bruselas con Pompeo, quien canceló una parada prevista en Moscú para informar a sus aliados europeos sobre las más recientes medidas de Washington.

El secretario de Estado compartió información sobre “crecientes” amenazas desde Irán en las reuniones, dijo a periodistas el representante especial de Estados Unidos para Irán, Brian Hook.

Trump, quien quiere obligar a Teherán a aceptar un acuerdo sobre control de armas mucho más extenso, ha enviado un portaaviones y bombarderos B-52 al Golfo para afrontar lo que funcionarios de Estados Unidos catalogan de amenaza contra sus tropas en la región.

Irán dice que la estrategia equivale a una “guerra psicológica” y un comandante de la Guardia Revolucionaria dijo que Teherán tomaría represalias ante cualquier movimiento agresivo.

Por su parte, el jefe de la diplomacia alemana, Heiko Maas, advirtió este lunes a Pompeo, contra una “escalada militar” con Irán y reiteró el apoyo de los europeos al acuerdo sobre el programa nuclear iraní.

Teherán anunció el 8 de mayo que suspendía algunos de sus compromisos adquiridos e urgió a los europeos a sacar en 60 días a los sectores petrolero y bancario iraní de su aislamiento causado por las sanciones estadounidenses.