La congresista de Nueva York regresó a un restaurante en Queens el viernes, buscando resaltar la difícil situación de los trabajadores que conoce
Cuando regresó a Nueva York para ser camarera y camarera por primera vez desde que ingresó al Congreso, Alexandria Ocasio-Cortez dijo que el salario mínimo federal equivalente a la "servidumbre contratada".
Antes de llegar a la fama nacional como representante del distrito 14 del Congreso de Nueva York, la mujer de 29 años del Bronx trabajaba en un restaurante mexicano en Manhattan. El viernes regresó a las mesas de espera y bebidas combinadas, en apoyo de One Fair Wage , una política que daría derecho a los trabajadores que reciben propinas a un salario mínimo de $ 15 por hora más propinas.
El salario mínimo federal para trabajadores de restaurantes y bares y otros trabajos que dependen de las propinas, como los trabajadores de salones de uñas, es de solo $ 2.13 por hora. Aunque el salario mínimo en Nueva York es de $ 15 por hora, esto no se aplica a los trabajadores que reciben propinas, a quienes se les puede pagar tan solo $ 7.50.
Ocasio-Cortez, vestido con un delantal y parado detrás de la barra del restaurante The Queensboro en Jackson Heights , dijo a los trabajadores y pequeños empresarios que la tasa actual era "inaceptable".
"Cualquier trabajo que pague $ 2.13 por hora no es un trabajo, es una servidumbre por contrato", dijo, con un fuerte aplauso. “Todo trabajo tiene dignidad. Y la forma en que damos dignidad laboral es pagando a las personas el respeto y el valor que valen como mínimo. Tenemos que ganar un salario justo y debemos aumentar el salario mínimo nacional a $ 15 por hora, nada menos ”.
En ciudades como Nueva York , San Francisco y Chicago, dijo, el salario mínimo debería ser más alto, para apoyar los "costos de fuga" de la vida.
"Porque cuando nuestras rentas se están agotando, cuando nuestros costos de comida se están agotando, en ciudades densas como Nueva York, Chicago, San Francisco, necesitamos asegurarnos de que las personas reciban el pago suficiente para vivir, punto", dijo.
Ocasio-Cortez también describió cómo trabajó en la industria durante cuatro años, primero como anfitriona en un pub irlandés mientras estaba en la escuela secundaria y trabajando en restaurantes después de la universidad, la dejó dependiente de sus consejos y la obligó a hacer concesiones.
"Recuerdo que trabajé en restaurantes", dijo, "y, sabes, harías que alguien te dijera algo extremadamente inapropiado, o harías que alguien te toque, y es que sería el 28 del mes, El día 29 del mes. Y el primer día del mes siguiente comenzó a rodar y usted tiene que pagar un cheque de alquiler.
Y, por lo tanto, es más probable que te defiendas y rechaces el acoso sexual el día 15 del mes, o tal vez el día 10 del mes, cuando podrías obtener un turno adicional para compensar el hecho de decirle a ese tipo que haga ruido. apagado."
Dijo que las mujeres son particularmente vulnerables: "Como mujer te permites, nos permitimos ser más vulnerables de lo que cualquier persona debería estar en los Estados Unidos de América debido a la desesperación económica".
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Antes de su discurso, recibió pedidos de invitados emocionados, que hablaban inglés y español, y servía pizzas antes de ir detrás de un bar por primera vez desde que asumió el cargo. Después de hacer exitosamente su primera margarita, su vigorosa sacudida fue recibida con vítores, ella proclamó: “¡Todavía lo tengo! Estaba asustado."
Larry Obregón, barman del restaurante, cantó las alabanzas de Ocasio-Cortez. "Ella es genial, es increíble en el bar", dijo. "Ella hizo una margarita, hizo un par de bebidas mixtas con vodka y otros licores. Obviamente, respalda sus antecedentes, ella también solía estar en la industria de servicios, por lo que sabe exactamente de qué está hablando ". La cantinera Serena Thomas, de 27 años, y Nikolas Vagenas, de 24, a quienes Ocasio-Cortez les sirvió pizzas de berenjena y champiñones, calificaron al servicio al cliente de la congresista. Thomas dijo: "Fue genial, ella todavía sabe cómo hacerlo". Vagenas: "Sí, ella todavía lo tiene, 100%" (The Guardian)