El ministro del interior de Rumania despidió al jefe de la policía después del asesinato de una adolescente cuyas repetidas llamadas de emergencia no fueron escuchadas durante horas.
La joven de 15 años fue secuestrada el miércoles, pero logró hacer tres llamadas y dar a los oficiales detalles sobre dónde estaba detenida.
Su familia dice que los oficiales no tomaron sus llamadas en serio, mientras que la policía dice que tuvieron dificultades para localizarla.
Se cree que la menor murió a manos de su captor.
La policía encontró restos humanos y joyas que la chica usaba en una casa y detuvo a un hombre de 65 años para interrogarlo.
La adolescente, que solo ha sido identificada como Alexandra, fue secuestrada cuando intentaba pedir un aventón en su casa en la ciudad de Caracal, al sur del país, según la policía. El jueves por la mañana, llamó a la línea directa de emergencia 112 tres veces y dijo que había sido secuestrada por un conductor de automóvil que la había recogido, informa la agencia de noticias AFP.
Según el jefe de la policía, Ioan Buda, que ahora ha sido despedido, Alexandra gritó: "Viene, viene", antes de que se desconectara la llamada.
Las autoridades dicen que inicialmente se esforzaron por rastrear la ubicación desde la que llamó.
Identificaron la casa donde creían que estaba detenida a las 03:00 del viernes, informes de noticias de AP, citando a los medios locales.
Sin embargo, la policía luego solicitó una orden de registro, aunque no era legalmente requerida, y esperó hasta la mañana para entrar a la casa.
No registraron la propiedad hasta 19 horas después de la última llamada de emergencia de la menor.
La policía envió los restos humanos para su análisis, y sospecha que podrían pertenecer a Alexandra, así como de un joven de 18 años que desapareció en abril, informa Reuters.
La ministra del Interior, Nicolae Moga, dijo que el jefe de policía había sido despedido "porque se requieren medidas drásticas".
El fiscal interino Bogdan Licu, mientras tanto, dijo a la estación de televisión Antena 3: "Por qué [la policía] esperó ... debe ser aclarado. Una niña que, por todas las indicaciones, podría haberse salvado, murió".