WASHINGTON, EE.UU., 4 de febrero (EFE/AFP).-El presidente de EE.UU., Donald Trump, pronunció este martes ante el Congreso su tercer discurso anual sobre el Estado de la Unión, dirigido a mostrar sus logros y ampliar su base de votantes para asegurarse la reelección en noviembre.
“Hace tres años iniciamos el gran retorno de Estados Unidos”, arrancó Trump, con un discurso lleno de reproches al Gobierno de Barack Obama (2009-2017) -al que no mencionó- y que entusiasmó a los republicanos, pero no gustó a los demócratas.
“Los años de decadencia económica han terminado. Los días en los que usaban a nuestro país, se aprovechaban de él, e incluso era despreciado por otras naciones, ha quedado atrás”, dijo el mandatario estadounidense.
“Si no hubiésemos revertido las políticas económicas fallidas del Gobierno anterior, el mundo ahora no estaría viendo este gran éxito económico”, agregó el presidente, un comentario que provocó los abucheos de algunos demócratas.
Trump presumió de creación de empleo, de bajadas de impuestos y de “luchar por acuerdos comerciales justos y recíprocos”.
“Nuestra agenda es implacablemente protrabajadores, profamilia, procrecimiento y, sobre todo, proestadounidense”, dijo.
“Increíblemente, la tasa media de desempleo bajo mi Gobierno es menor que bajo cualquier otra Administración en la historia de nuestro país”, dijo Trump, quien afirmó que la bonanza económica es un “boom” de la clase obrera.
“Prometí a nuestros ciudadanos que impondría aranceles a China para confrontar el robo masivo de trabajos estadounidenses. Nuestra estrategia ha funcionado”, proclamó.
En contraste con la importancia que le dio a la economía, Trump pasó casi por encima del comercio.
Y es que tras casi 18 meses de guerra comercial y la consiguiente escalada de aranceles, Trump selló en diciembre una tregua parcial con Pekín que incluye la retirada de algunos gravámenes y el aumento de las compras chinas de productos estadounidenses.
“Muchos políticos vinieron y se fueron, con la promesa de cambiar o reemplazar el TLCAN, pero al final no hicieron absolutamente nada. Pero al contrario que muchos otros que vinieron antes que yo, yo cumplo mis promesas”, sentenció.
El discurso de Trump ante ambas cámaras del Congreso estadounidense llega, además, un día antes de que el Senado, de mayoría republicana, cierre el juicio político contra él con una más que probable absolución de los dos cargos que enfrenta por sus presiones a Ucrania, dado que se necesitaría una mayoría de dos tercios para destituirle.
Sin embargo, la Casa Blanca adelantó Trump no hablaría directamente del proceso de destitución y se esperaba que, en cambio, se centrara, tal como ocurrió en alardear de la buena salud de la economía bajo su mandato, con la vista puesta en las elecciones presidenciales de noviembre.
“En solo tres años, hemos destrozado la mentalidad del declive estadounidense y hemos rechazado que se minimice el destino de Estados Unidos”, dijo Trump.
Tal como se esperaba, el mandatario presumió de sus avances para restringir la entrada de inmigrantes indocumentados y de la ratificación este mes en EE.UU. del tratado comercial T-MEC, renegociado con México y Canadá a partir del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en vigor desde 1994.
“Muchos políticos vinieron y se fueron, con la promesa de cambiar o reemplazar el TLCAN, pero al final no hicieron absolutamente nada. Pero al contrario que muchos otros que vinieron antes que yo, yo cumplo mis promesas”, dijo Trump.
Entre los temas recurridos, Trump apeló al tema del muro fronterizo con México , sobre el que dijo que tendrá más de 800 kilómetros construidos y será concluido el año próximo.
“Ya hemos completado más de 100 millas (165 kilómetros) y habrá más de 500 millas (805 kilómetros) a principios del próximo año”, dijo sobre lo que considera su “proyecto bandera” para combatir la entrada de inmigrantes indocumentados por la frontera Sur de EE.UU.
Dijo al respecto que el paso de inmigrantes indocumentados hacia su país desde México ha disminuido un 75% desde mayo pasado, como resultado de los “esfuerzos sin precedentes” de su Administración.
“A medida que el muro sube, las incautaciones de drogas aumentan y los pasos fronterizos disminuyen”, remarcó, y seguidamente destacó los “históricos” acuerdos de cooperación con los Gobiernos de México, Honduras, El Salvador y Guatemala.
Entre los invitados al acto figuró el líder opositor venezolano Juan Guaidó.
“Con nosotros, en la galería está el presidente legítimo de Venezuela, Juan Guaidó. Todos los estadounidenses están unidos con el pueblo venezolano en su lucha justa por la libertad”, afirmó Trump.
“El dominio de la tiranía de Maduro va a ser aplastado y roto”, dijo.
En el hemiciclo, el dirigente venezolano estaba sentado en el palco de invitados de la primera dama de EE.UU., Melania Trump, y conversó con la asesora e hija del presidente, Ivanka Trump.
“Conforme restauramos el liderazgo de EE.UU. en el mundo, seguimos apoyando la libertad de nuestro hemisferio. Es por eso que mi Administración revocó las policías fallidas de la Administración anterior sobre Cuba. Estamos apoyando las esperanzas de cubanos, nicaragüenses y venezolanos para restaurar la democracia”, dijo el mandatario.