WASHINGTON, EE.UU., 27 de mayo (AFP/REUTERS).- Tras semanas de paralización económica, la perspectiva de un rebote sigue siendo “altamente incierta” y las empresas son pesimistas sobre cuán rápido se normalizarán las cosas, dijo el miércoles la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
El Libro Beige de la Fed, que encuesta a los agentes de la economía estadounidense, mostró que la actividad cayó severamente en las últimas semanas en todas las regiones con inquilinos que no pueden pagar su alquiler y las ventas de autos en abrupta declinación.
“Aunque muchos de los contactados dijeron estar esperanzados en que la actividad general crecerá cuando se reabran los negocios, las perspectivas siguen siendo altamente inciertas y muchos fueron pesimistas sobre el ritmo potencial de la recuperación”, dijo la Fed.
El declive económico debido a la pandemia se notó en los 12 distritos de la Fed con “agudas caídas en la mayoría” en la mayoría de ellos, y además eso estuvo acompañada con severas caídas del empleo, reveló la encuesta.
Datos del gobierno muestran que desde mediados de marzo los empleos perdidos se acercan a los 40 millones, aunque algunas de las Fed regionales dijeron que esos despidos son considerados temporales.
Las empresas mencionaron también una lista de “desafíos para el retorno de los empleados al trabajo, incluyendo preocupaciones sobre la salud de los trabajadores (y) reducido acceso a guarderías para niños”.
También se advirtió una elevada demanda del programa gubernamental de protección de los salarios, que ayuda a las empresas a “reducir o evitar” despidos, dijo el informe.
Algunas compañías reportaron sin embargo haber ofrecido aumentos salariales temporales a personal esencial “para competir con el seguro por desempleo” que creció con la pandemia.
La encuesta nacional recogió información hasta el 18 de mayo y será la referencia que se utilizará en la reunión de política monetaria de la Fed marcada para los días 9 y 10 de junio.
El desplome
El desplome en la actividad que muestra la última medición del banco central de la actividad empresarial en sus 12 distritos arrojó luz sobre la profundidad del golpe económico generado por el virus, que llevó a una contracción sin precedentes y a una cifra de muertos que se aproxima a los 100,000 en el país.
La Fed actuó de manera agresiva para respaldar a la economía a medida que el nuevo coronavirus se propagaba por el mundo y provocaba cierres generalizados de empresas y una escalada en la pérdida de empleos.
El banco central recortó las tasas de interés a cerca de cero en marzo, lanzó una ronda de compras de activos sin límites y anunció una serie de herramientas de emergencia para respaldar a las compañías y los hogares.
Una nueva línea de préstamo, que comenzará además a otorgar créditos a empresas de tamaño medio, debería comenzar a distribuir fondos dentro de dos semanas, aseguró el domingo el presidente de la Fed de Boston, Eric Rosengren.
El banco central también alista una línea que prestaría efectivo a municipalidades con problemas de liquidez que están lidiando con menores ingresos debido justamente a la crisis.