Un tiroteo en un edificio de oficinas del sur de California dejó a cuatro personas muertas y dos heridas antes de que la policía lesionara al sospechoso, informaron las autoridades. Uno de los fallecidos es un niño.
Luego de recibir un reporte de disparos, la policía acudió a un edificio pequeño de dos pisos en la Avenida Lincoln Oeste, en Orange, aproximadamente a las 5:30 de la tarde, señaló la policía en Facebook.
“Los agentes policiales llegaron cuando se estaban efectuando disparos y hallaron a varias víctimas en el lugar, incluyendo muertos. Se produjo una balacera en la que participaron los policías", se afirma en la publicación, efectuada poco después de las 7 de la noche. “La situación se ha estabilizado y no hay riesgo para el público".
En el comunicado de la policía se dijo que había ocurrido un tiroteo policial en el edificio, que parecía ser un complejo de negocios y oficina. Sin embargo, el departamento luego informó que la situación se había "estabilizado" y que no había ninguna amenaza para el público.
El Departamento de Bomberos atendió a seis pacientes, dos de los cuales fueron trasladados a un hospital cercanos. Además, se indicó que no hubo bajas entre las fuerzas de seguridad, pero uno de los sospechosos fue herido.
Ante lo ocurrido, el gobernador de California, Gavin Newsom, reaccionó a la noticia en su cuenta de Twitter: "Horrible y desgarrador. Nuestros corazones están con las familias afectadas por esta terrible tragedia esta noche".
La representante Katie Porter emitió una declaración en respuesta al tiroteo: “Me entristece profundamente los informes de un tiroteo masivo en el condado de Orange, y sigo pensando en las víctimas y sus seres queridos mientras seguimos aprendiendo más. Mi equipo y yo estaremos monitoreando la situación de cerca”.
AR