Durante los alegatos finales del juicio por el asesinato del George Floyd, el fiscal Steve Schleicher declaró que el hombre afroamericano asesinado por policías no era una amenaza para nadie y que “pidió ayuda con su último aliento”.
"George Floyd suplicó hasta que no pudo hablar más", declaró Schleicher al jurado en un tribunal de Minneapolis, en el estado de Minnesota. "Todo lo que se le requirió fue un poco de compasión y no mostró nada ese día", agregó.
"Pidió ayuda con su último aliento, pero el oficial no ayudó", dijo Schleicher.
Además, el fiscal recalcó que Floyd no era una amenaza para nadie, no estaba tratando de lastimar a nadie.
El oficial Derek Chauvin, de raza blanca y de 45 años, se arrodilló sobre el cuello de Floyd durante más de nueve minutos mientras el hombre negro de 46 años yacía boca abajo en el suelo y esposado, según imágenes filmadas durante el arresto.
El exagente está acusado de asesinato y homicidio involuntario por la muerte de Floyd el 25 de mayo de 2020, en un incidente que provocó multitudinarias protestas en Estados Unidos y en el extranjero contra la injusticia racial y la brutalidad policial.
Chauvin, que llevaba 19 años en el Departamento de Policía de Minneapolis, se enfrenta a un máximo de 40 años de prisión si es declarado culpable del cargo más grave: asesinato en segundo grado.
Con información de El Universal
LAF