Hace unas semanas, una nueva variante de coronavirus, covid-19, habría sido identificada por investigadores en Francia, quienes la nombraron IHU y podría ser derivada de otra cuyos primeros casos se detectaron en la República del Congo en septiembre de 2021.
Fue el Instituto Hospitaliario Universitario de Marsella quien hizo y comunicó el hallazgo de la nueva variante del virus SARS-CoV-2 el 9 de diciembre.
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Sus investigadores publicaron a finales del mes pasado un preestudio, pendiente todavía de validación por sus pares, sobre esta variante IHU, llamada B.1.640.2, de la que se conoce todavía bastante poco teniendo en cuenta el limitado número de casos registrados.
Según este centro especializado en enfermedades infecciosas, creado y dirigido por el controvertido médico Didier Raoult, los primeros de esos casos localizados por los científicos se habrían dado en la localidad de Forcalquier, en el departamento de Alpes de Alta Provenza, en Francia.
El estudio francés tiene constancia de una docena de casos en la región de Marsella que se asocian con viajes a Camerún.
Esta variante contiene 46 mutaciones, es decir, todavía más que ómicron, y es una de las dos derivadas de la B.1.640 que se había localizado a finales de septiembre en la República del Congo.
Un elemento peculiar de la "variante IHU es que una de sus mutaciones se asocia con un posible aumento de la transmisión del virus", de acuerdo con la investigación.
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AESC