El ejército turco lanzó varios bombardeos en el norte de Siria que dejaron al menos 12 soldados muertos, tanto de las fuerzas kurdas como de los movimientos favorables al régimen, indicó la oenegé Observatorio Sirio de los Derechos Humanos.
El Ministerio de Defensa turco indicó que los bombardeos estaban dirigidos a posiciones del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) y de las kurdas Unidades de Protección Popular (YPG), que Ankara considera una extensión de esa formación ilegalizada en Turquía.
"La operación aérea Pence Kilic se desplegó en las regiones en el norte de Irak y Siria que son usadas como bases para ataques de terroristas en nuestro país", dijo el ministerio en un comunicado.
Los ataques se producen apenas unos días después de que Turquía acusara al PKK del atentado que causó seis muertos y 81 heridos en el centro de Estambul el pasado domingo.
Tanto el PKK, que encabeza una insurrección de décadas en Turquía, como las YPG negaron cualquier implicación en el ataque.
"Ha llegado la hora de ajustar cuentas. Los bastardos deberán rendir cuentas por sus ataques pérfidos", tuiteó en la madrugada del domingo el Ministerio de Defensa turco junto a una imagen de un avión despegando para una operación nocturna.
"Los nidos de terror son arrasados por ataques de precisión", añadió en otro mensaje en Twitter acompañado de un video que muestra cómo se fija el objetivo en un blanco, que estalla poco después.
Turquía realizó más de 20 ataques contra posiciones en las provincias sirias de Alepo (norte) y Hasaka (noreste), indicó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), un grupo británico con una extensa red de contactos en Siria.
Los bombardeos mataron al menos a seis miembros de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) y a otros seis soldados del régimen sirio de Bashar al Asad, indicó este grupo de monitorización.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
AR