La policía canadiense confirmó este jueves que 15 personas murieron, y otras 10 han sido hospitalizadas, después de que un camión se estrelló contra un autobús que transportaba a personas de la tercera edad a un casino en el oeste de Canadá.
Las autoridades advirtieron que el número de muertos podría aumentar en las próximas horas.
El accidente se produjo en la autopista Trans-Canadá, que conecta el extremo oriental del país con la costa del Pacífico, en las cercanías de la localidad de Carberry, en la provincia de Manitoba, en el oeste de Canadá.
La Policía Montada de Canadá dijo en una conferencia de prensa que el accidente se produjo alrededor de las 11:43 hora local del jueves entre un camión de carga y un autobús dedicado al transporte de personas con discapacidad en el que viajaban 25 personas.
Sands Hill Casino, un casino localizado en la localidad de Carberry, confirmó a medios locales que el autobús era de su compañía y que en el momento del accidente el vehículo se dirigía al lugar.
El comandante de la Policía Montada en Manitoba, Rob Hill, declaró que en el accidente el autobús cruzaba la autopista Trans-Canadá y que la mayoría de las víctimas son personas de la tercera edad.
Imágenes transmitidas por televisiones locales muestran los restos calcinados de un autobús en el arcén de la autopista así como un camión de gran tonelaje con la parte frontal del motor totalmente destrozada.
Una testigo que llegó a la zona del accidente poco después del impacto declaró a CTV que la escena es horrible y que “no ha quedado nada del vehículo”.
Otro testigo dijo que “la gente estaba intentando salvarse y el personal médico y los bomberos les ayudaban a salir. Es difícil de describir, pero era horrible”.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, señaló en Twitter que “las noticias que llegan de Carberry, Manitoba, son increíblemente trágicas”.
“No puedo imaginar el dolor que los afectados están sintiendo, pero los canadienses están aquí con vosotros”, añadió.
En un comunicado, la Policía Montada de Canadá señaló que ha desplegado todas las unidades disponibles en la zona occidental de la provincia de Manitoba.
Mientras, en las ciudades de Winnipeg y Regina, los hospitales fueron colocados en “código naranja”, que se activa cuando se produce un incidente con un número muy elevado de víctimas.
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DL