La Unión Europea instó este sábado 26 de octubre de 2024 a la "máxima moderación" en Medio Oriente tras los ataques entre Israel e Irán, advirtiendo sobre el riesgo de una "escalada incontrolable".
A través de un comunicado, la UE reafirmó su compromiso con la reducción de tensiones y pidió a ambas partes limitar el uso de la fuerza. Nabila Massrali, portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior, destacó que aunque la UE reconoce el derecho de Israel a la defensa, es crucial evitar cualquier intensificación del conflicto, ya que "no beneficia a nadie".
La escalada inició tras el ataque de Israel a instalaciones militares iraníes en represalia por el lanzamiento de más de 180 misiles balísticos por parte de Irán hace un mes. El bombardeo israelí causó la muerte de al menos dos militares iraníes. En respuesta, Irán reafirmó su derecho a defenderse, mientras varios países árabes instaron también a la moderación para evitar que el conflicto desemboque en una guerra regional.
Respuesta internacional
La petición de la Unión Europea se suma a la de otros líderes globales. El canciller alemán Olaf Scholz alertó sobre una "posible escalada" del conflicto y subrayó la necesidad de evitar una mayor extensión de la violencia en la región. Turquía condenó los bombardeos israelíes, instando a la comunidad internacional a tomar medidas inmediatas contra Israel. El primer ministro británico, Keir Starmer, solicitó que Irán no responda a los ataques para evitar una mayor escalada, mientras que Francia exhortó a ambas partes a "abstenerse de cualquier acción que pueda agravar la situación".
Rusia también expresó su "profunda preocupación" por el riesgo de un incremento de las hostilidades y calificó la situación como una "escalada explosiva". La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zajárova, reiteró el llamado a todas las partes para que se abstengan de usar la fuerza.
Alerta en Medio Oriente
En la región, Arabia Saudita condenó el ataque israelí, advirtiendo sobre las consecuencias de una escalada. Irak, por su parte, criticó la falta de respuesta internacional ante lo que calificó como un "comportamiento brutal" por parte de Israel y alertó sobre las "peligrosas consecuencias" de la inacción global.
Además, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, se declaró "profundamente alarmado" por el conflicto entre ambos países y pidió un esfuerzo diplomático para evitar una extensión de la violencia.
La comunidad internacional sigue atenta a la evolución de esta situación, que podría desestabilizar aún más la región y provocar una intervención de múltiples actores en el conflicto.
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