El juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Alexandre de Moraes, autorizó este martes el restablecimiento de la red social X en el país, tras un bloqueo que se extendió por más de un mes. La plataforma, propiedad de Elon Musk, fue suspendida el 30 de agosto debido a desacuerdos sobre libertad de expresión y el manejo de cuentas de extrema derecha, según documentos publicados por la corte.
El cierre de X en Brasil, una de las principales redes sociales en ese país con una base de usuarios de entre 20 y 40 millones de personas, obedeció a la falta de cumplimiento de Musk con las disposiciones judiciales impuestas por De Moraes.
El juez había ordenado el bloqueo de varias cuentas por presunta desinformación y solicitó la designación de un representante legal en el país. Este último requerimiento fue clave, ya que las leyes brasileñas obligan a las empresas extranjeras a contar con un representante local que reciba notificaciones judiciales y responda a ellas en tiempo y forma.
Pese a que Musk criticó públicamente a De Moraes, calificándolo de censor y autoritario, la plataforma tuvo que acatar las disposiciones legales brasileñas para reanudar su servicio. Entre estas, se incluyó el pago de multas pendientes, el bloqueo de cuentas, y el nombramiento de Rachel de Oliveira Villa Nova Conceição como su representante legal en el país. Conceição, quien había renunciado en agosto, fue reinstalada en el cargo el 20 de septiembre.
“La reanudación de las actividades de X en el territorio nacional depende del cumplimiento pleno de las leyes brasileñas y del respeto a las decisiones del poder judicial”, puntualizó De Moraes en el fallo judicial. La plataforma declaró en su cuenta de Global Government Affairs que se enorgullece de volver a Brasil, asegurando su compromiso con la libertad de expresión dentro de los límites de la ley.
X había retirado a su personal del país dos días antes del cierre, el 28 de agosto, en respuesta a las amenazas de arresto dirigidas a su entonces representante legal. A partir de la reanudación del servicio, la red social se ha comprometido a respetar las normativas y decisiones de las autoridades brasileñas, un hecho que subraya el respeto a la soberanía nacional y asegura la permanencia de la plataforma en el país.
Con esta reapertura, la red social X busca recuperar su lugar en el mercado brasileño y establecer una relación más estable con las autoridades locales, en un contexto donde el cumplimiento de las leyes locales es imprescindible para operar en el país.
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