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Nicolas Sarkozy, expresidente de Francia, fue ratificado culpable por corrupción

El exmandatario francés, condenado por corrupción e influencia indebida tendrá que cumplir un año de prisión en casa con brazalete electrónico.
Nicolas Sarkozy, expresidente de Francia / AP

El Tribunal Supremo de Francia confirmó este miércoles la condena al ex presidente Nicolas Sarkozy por cargos de corrupción e influencia indebida. La sentencia, que ratifica un fallo de 2021, impone al ex mandatario una pena de un año de prisión, la cual podrá cumplir en su domicilio con la supervisión de un brazalete electrónico.

Detalles del Caso de Corrupción

El caso se remonta a 2014, cuando conversaciones telefónicas interceptadas revelaron que Sarkozy, junto con su abogado, Thierry Herzog, intentó sobornar al magistrado Gilbert Azibert.

Según las pruebas, ofrecieron al magistrado un cargo en Mónaco a cambio de información confidencial relacionada con una investigación sobre presunto financiamiento ilegal en la campaña presidencial de Sarkozy.

El Tribunal de Casación subrayó en su comunicado que “las condenas y sentencias son definitivas”, marcando un precedente histórico como la primera vez en la Francia moderna que un ex presidente recibe una condena penal vinculada a actos durante su mandato.

El juicio, conocido como el caso Bygmalion, contra el exmandatario conservador y otros 13 encausados se abrió el 20 de mayo

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Nuevos Procesos Legales en Puerta

A pesar de negar cualquier acto ilícito en este caso y otros procesos en curso, Sarkozy enfrentará un nuevo juicio en París el próximo mes. Las acusaciones señalan que recibió millones de dólares del régimen del dictador libio Moammar Gadafi para financiar su campaña presidencial en 2007.

Sarkozy y su Influencia Política Actual

Desde su retiro de la vida pública en 2017, Sarkozy sigue siendo una figura influyente en la política francesa. Incluso tras su condena, asistió recientemente a la reapertura de la Catedral de Notre Dame en París, reafirmando su presencia en eventos destacados del país.

Con esta sentencia, la imagen del ex presidente se ve gravemente afectada, mientras que Francia envía un mensaje contundente sobre la lucha contra la corrupción en la esfera política.

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