Hace semanas, en la República Democrática del Congo se reportó la aparición de una enfermedad desconocida, que afectó la provincia de Kwango. Desde finales de octubre, se registraron 891 casos, incluyendo 48 decesos.
Para la identificación de esta enfermedad, expertos viajaron a las zonas afectadas para, además de brindar apoyo, poder recopilar datos de investigación. La diligencia de estos equipos especializados lograron conocer los factores subyacentes del brote.
Los expertos lograron identificar una combinación de malaria, virus como SARS-CoV-2, gripe y adenovirus. La malnutrición entre individuos ayudó a empeorar el estado de salud de los pacientes contagiados.
Entre los síntomas padecidos por los afectados se incluía tos, fiebre y debilidad, los cuales son síntomas compatibles con infecciones respiratorias. La respuesta sanitaria a la enfermedad se activó en noviembre, tras las primeras señales de alarma en Kinshasa.