Por primera vez desde el intento de asesinato contra Donald Trump, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, volvió a la campaña el martes, intentando reforzar su candidatura para la reelección mientras resurge la preocupación por su edad.
Mientras Trump disfruta de un fuerte apoyo en la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, Biden se encuentra en Las Vegas para conectar con los votantes afroamericanos en el evento del grupo de defensa NAACP.
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En esta ciudad, Biden hizo un firme llamado a sus seguidores para "oponerse a la violencia en Estados Unidos" y trabajar juntos para "sacar estas armas de guerra de las calles del país." Este pronunciamiento llega tras el tiroteo dirigido contra el expresidente Donald Trump durante un evento de campaña el sábado pasado.
"Se utilizó un AR-15 en el tiroteo contra Donald Trump... Es hora de prohibirlos," señaló Biden, recordando que ya había implementado una prohibición similar hace casi 30 años, y se comprometió a hacerlo de nuevo.
En una reunión de la Asociación Nacional para el Progreso de la Gente de Color (NAACP), Biden destacó que la política estadounidense se había "calentado demasiado." Hizo un llamado a todos los ciudadanos a asumir la responsabilidad de "bajar la temperatura y condenar la violencia en cualquier forma." Sus declaraciones fueron recibidas con aplausos y vítores de la audiencia.
Biden también abordó la preocupación de sus seguidores afroamericanos, destacando la necesidad de trabajar juntos para mejorar la seguridad y la justicia racial en el país. En su discurso, reiteró su compromiso de prohibir las armas de asalto y enfatizó la importancia de la unidad y la paz.
"Todos tenemos la responsabilidad de bajar la temperatura y condenar la violencia en cualquier forma," afirmó Biden, subrayando que el momento es crítico para reducir la polarización política.
Desafíos en la campaña y apoyo afroamericano
A pesar de estar rezagado en las encuestas frente a Trump, Biden se mantiene firme en su campaña, desafiando las peticiones de algunos demócratas para que renuncie después de su desastroso desempeño en el debate y varios otros errores, incluyendo la reciente confusión al presentar al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy como Putin en la cumbre de la OTAN.
En su discurso del martes, aunque en algunos momentos Biden pareció arrastrar ligeramente las palabras, sus comentarios fueron recibidos con entusiasmo. Enumeró algunos de los logros de su administración y criticó el historial de Trump durante su mandato de 2016 a 2020. Además, hizo promesas sobre lo que haría si fuera reelegido en noviembre, incluyendo la restauración del derecho al aborto.
"Con viento y marea, vamos a restaurar Roe vs Wade como la ley del país," afirmó, reforzando su compromiso con los derechos reproductivos.
Biden también criticó a Trump por sus comentarios durante el debate del mes pasado sobre los inmigrantes ilegales que aceptaban los llamados "trabajos negros." En respuesta, Biden dijo: "Me encanta su frase, trabajos negros, dice mucho sobre el hombre y sobre su carácter. Amigos, sé lo que es un trabajo negro. Es un vicepresidente de los Estados Unidos. Sé lo que es un trabajo negro. El primer presidente negro... Barack Obama."
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